Comerciantes e independientes son las principales víctimas de la extorsión en lo que va del año, según PNP

La extorsión se sigue apoderando de territorio nacional y cada vez más se extiende en diversas partes. Una persona ya no puede invertir o continuar con sus labores con el temor de ser amenazada por redes criminales, e incluso poner en riesgo la integridad física de sus familiares.

Un informe de seguridad de la Policía Nacional del Perú —que muestra datos del 1 de enero al 7 de noviembre de 2024— revela que se han denunciado 16 mil 204 casos de extorsión. Además, la Línea 111 atendió en total 4.306 llamadas telefónicas durante este periodo, pero solo 838 eran relacionadas con este delito.

No obstante, en otro boletín informativo de la PNP, que va desde el 1 de enero hasta el 30 de octubre, se evidencia que los casos habían alcanzado a 15 mil 711. Es decir, en ocho días, se reportaron 493 denuncias.

Según datos de la PNP, las víctimas de extorsión provienen de diversos sectores, reflejando la amplitud del alcance de este delito. El grupo más afectado son los comerciantes, con 3.639 casos registrados, lo que sugiere que son un blanco frecuente debido a su actividad económica visible. Les siguen los trabajadores independientes (3.468), profesionales (2.256) y amas de casa (1.251).

Otros sectores afectados incluyen transportistas (931), empleados (633), estudiantes (628), agricultores (264), trabajadores de construcción civil (248) y funcionarios públicos (113). Un número significativo de casos (2.747) no especifican la ocupación de la víctima, lo que dificulta un análisis más preciso del perfil.

Cabe precisar que, desde los centros comerciales más conocidos, han denunciado públicamente que son amenazados a través de mensajes. Además, los negocios locales también se suman a esta lista.

La modalidad más común que se ha identificado es la ‘típica u ordinaria’, con 14 mil 163 casos registrados, la cual suele involucrar amenazas directas o indirectas para obtener dinero. Le sigue el ‘gota a gota’, con 793 casos, un sistema de préstamo informal con altas tasas de interés y métodos de cobranza intimidatorios.

El ‘cobro de cupos’ representa 731, donde se exige un pago a cambio de supuesta protección. El ‘chalequeo’ con 410 casos, implica el robo de información personal para luego extorsionar a la víctima. Finalmente, 107 reportes se clasifican como ‘otros’.

En muchas ocasiones, las amenazas terminan siendo ejecutadas por los delincuentes. De esta manera, se revela que se han reportado 934 hechos de sicariato en lo que va del año.

Estos se atribuyen principalmente a ajustes de cuentas, con 226 casos registrados. Le sigue la negativa al pago de cupos, con 55, lo que evidencia la relación entre la extorsión y la violencia. La venganza figura como móvil en 29 casos, mientras que 7 casos se clasifican como pasionales.

Un número considerable de casos, 617, se reportan con móvil desconocido. Esta problemática continúa y cada día se reportan más casos.