Raúl Pérez Reyes, ministro de Transportes (MTC), defendió la permanencia de Juan José Santiváñez ante la ola de críticas por la falta de mea culpa ante la querella presentada por Iván Quispe Palomino, a quien el titular del Mininter lo calificó de “número dos de Sendero Luminoso” en distintos medios de comunicación.
Desde la presentación del Ferrocarril Lima-Ica, el líder del MTC minimizó las expresiones y captura errónea de Quispe Palomino, quien si bien purgó condena por terrorismo, se rehabilitó de acuerdo a expertos en la materia y se desempeña desde el 2009 como albañil. Tan es así que es considerado como traidor.
“El ministro del Interior está haciendo un importante trabajo, ustedes lo ven todos los días liderando el proceso de capturas, a cargo de la Policía Nacional del Perú, y esto está permitiendo en muchos distritos la reducción de los niveles de criminalidad. Es importante mantenerlo, creo que él está haciendo un buen trabajo y hay que seguir apoyando su trabajo”, declaró.
“Yo creo que no fue un error grave”, insistió ante la sorpresa de la prensa.
Cabe mencionar que desde su liberación, el Ejecutivo se mantiene en silencio, pese a que no solo el ministro del Interior propaló mentiras a nivel nacional, pues el premier Gustavo Adrianzén hizo lo mismo en conferencia de prensa.
Al ser consultado por los cuestionamientos sobre la captura, el premier dijo que “se trata de un delincuente terrorista y criminal” que tiene hasta tres identidades. “Fue capturado con un DNI falso”, afirmó.
No obstante, el Poder Judicial desmintió a ambos y dispuso su liberación. “Notifíquese al ciudadano Iván Quispe Palomino, en su domicilio procesal y donde se encuentra en custodia con copias certificadas de la presente resolución para su conocimiento, dejándose expresa constancia de su entrega en autos”, se lee en el documento.
Ya en libertad, el hombre capturado y retenido por error anunció que emprendería acciones en contra de las altas autoridades. En ese sentido, presentó una querella contra los ministros Gustavo Adrianzén y Juan José Santiváñez, solicitando una indemnización de un millón y medio de soles por daños morales y psicológicos, alegando que los ministros lo difamaron al atribuirle públicamente delitos de terrorismo y uso de documentos falsos.
“Que la justicia (...) aplique la ley y sancione punitivamente a los querellados por haber lesionado mi honor personal y dignidad humana al haber proferido, públicamente, afirmaciones falsas de incriminación delictiva respecto a mi persona, que son dos: i) de ser el mando N° 2 de Sendero Luminoso en el VRAEM –delito de terrorismo–; y ii) de haber portado y mostrado un DNI falso al momento de cuando fui intervenido por la autoridad policial –delito de uso de documento falso–”, se lee en el documento.
En otra parte del documento, Iván Quispe Palomino mencionó que, si bien el juzgado penal competente que asumió la causa hace casi treinta años “no ha procedido a rehabilitarme de la pena impuesta”, se considera como tal, pues no solo se ha venido desenvolviendo con total normalidad, sino que ha pagado la reparación civil que el Estado peruano le impuso.
Como parte de los datos que refuerzan la idea de un error de captura por parte de la Policía Nacional del Perú es que, además de tener pasaporte y haber viajado a Brasil, incluso participó de las Elecciones Generales del 2021, sin ningún problema.