En un fallo reciente, el Décimo Juzgado de Trabajo Permanente de Lima ordenó a la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML) reincorporar a 38 trabajadores de limpieza que fueron despedidos tras protestar contra la gestión del alcalde Rafael López Aliaga. En la resolución a la que accedió La República, el juez Carlos Anaya Borda calificó el despido como fraudulento, y otorgó un plazo de 20 días para hacer efectiva la restitución.
La salida de los afiliados al Sindicato de Trabajadores de la comuna (Sitomun) se habría dado por el uso del apelativo “Porky” en pancartas y arengas. La MML argumentó el cese a partir de una “grave indisciplina, injuria y faltamiento de palabra verbal o escrita en agravio” de Rafael López Aliaga. Sin embargo, el juzgado determinó que estos términos no eran lo suficientemente ofensivos como para justificar un despido.
“Los términos empleados por estos trabajadores no han sido denigrantes o sujetos a un improperio de tal calibre que pueda considerarse como una conducta injuriosa el cual socave la fama o trayectoria del empleador mediante imputaciones (conforme a los términos empleados en la carta de preaviso de despido) que haga irreconciliable la continuidad de la relación laboral”, expuso el magistrado, quien agregó que, incluso de asumirse una falta de respeto hacia el burgomaestre, esta no es suficiente para justificar el despedido.
Aunque el municipio apeló dicha decisión, la Segunda Sala Laboral Permanente de Lima confirmó la decisión de primera instancia y argumentó que el apelativo carece de una carga injuriosa, por lo que concluyó que la comuna actuó con un “ánimo malicioso y tendencioso” al fundamentar el despido en este hecho.
“A sabiendas de que el apelativo de Porky no contiene un ánimo injurioso —y por ende no existiría la falta grave imputada—, es utilizado para despedir de manera indiscriminada a todo un grupo de trabajadores sindicalizados e incluso algunos con cargo de dirigentes sindicales, razón por la cual es razonable colegir la existencia de un despido fraudulento”, se lee en el fallo, según el medio en mención.
Esta es la cuarta vez que el Poder Judicial ordena la reincorporación de los trabajadores, de acuerdo a Magdalena Jorge Vega, afiliada al sindicato. Las tres primeras órdenes se emitieron como medidas cautelares, mientras que la última se basa en la ejecución de una sentencia favorable a los obreros. A pesar de las órdenes judiciales, la MML ha argumentado la falta de presupuesto como razón para no reincorporar a los trabajadores. Ello, en medio de la contratación de 652 nuevos obreros de limpieza en un concurso reciente.
“Es puro pateo porque la intención de ellos no es reponer. Desde setiembre del año pasado tenemos la medida cautelar. Pero en el mes de agosto (de este año) hubo un concurso CAS para contratar a obreros de limpieza y han contratado a 652 obreros, lejos de reponer a los trabajadores que también son de limpieza”, dijo Jorge Vega.
El juez Anaya Borda advirtió que, de no cumplirse la orden, la municipalidad enfrentará multas de 20 unidades impositivas tributarias, equivalentes a 103 mil soles, que podrían aumentar en un 30% sucesivamente. Además, los funcionarios responsables podrían ser denunciados por desobediencia a la autoridad.
Cabe mencionar que la MML presentó un recurso de casación, el cual fue concedido por la Segunda Sala Laboral Permanente de Lima y el expediente se elevó a la Corte Suprema. No obstante, ello no suspende la ejecución de la sentencia a favor de los trabajadores.