El gobernador regional de La Libertad, César Acuña Peralta, ha propuesto que las Fuerzas Armadas asuman el control de las provincias de Trujillo y Virú, donde la criminalidad se expande sin límites. El anuncio se dio durante la toma de un tramo de la Panamericana Norte en el distrito de Chao por reclamos del centro poblado Valle de Dios
La propuesta de Acuña surge en el medio de este conflicto, que surge por una demanda de los ciudadanos contra el aumento acelerado de extorsiones y atentados, argumentando que la Policía Nacional del Perú (PNP) no ha logrado reducir los índices de inseguridad. “Si la Policía no ha podido parar este tema de la inseguridad, estoy evaluando gestionar que el control de Trujillo y Virú lo hagan las Fuerzas Armadas”, declaró Acuña
Mientras el tramo del kilómetro 504 de la Panamericana Norte era tomado, el gobernador hablaba en una conferencia de prensa sobre el fallo del Servicio de Inteligencia, quien según Acuña, debió prever y evitar la protesta que escaló.
Este bloqueo, que dejó seis heridos, según confirmó la Defensoría del Pueblo. Tres ciudadanos heridos fueron trasladados al Hospital Belén de Trujillo, y uno al Hospital Regional. También dos policías resaltaron agraviados, habrían sufrido contusiones producto de los enfrentamientos, ellos fueron atendidos en centro de salud Puente Chao.
Se reportó que uno de los civiles, fue un joven manifestante de 19 años que resultó herido por impacto de arma de fuego en el pecho, según confirmación de medios locales. César Acuña también ha solicitado el cambio de los coroneles y agentes del área de inteligencia policial, insistiendo en que la actual estrategia no está funcionando.
La propuesta de Acuña ha sido discutida en el Consejo de Estado Regional de La Libertad, que evalúa formalizar la solicitud al Poder Ejecutivo. La intervención militar en asuntos de seguridad interna es un tema delicado y requiere la aprobación del gobierno central, lo que añade un nivel de complejidad a la situación.
Mientras tanto, la población de Trujillo y Virú sigue enfrentando altos niveles de criminalidad, lo que ha llevado a algunos ciudadanos a tomar medidas drásticas como el bloqueo de carreteras para llamar la atención sobre su situación. La intervención de las Fuerzas Armadas, de ser aprobada, podría cambiar el panorama de seguridad en estas provincias, aunque también plantea interrogantes sobre el papel de la policía y la necesidad de reformas estructurales en el sistema de seguridad pública.
La Libertad sumergida en violencia
En la región de La Libertad, la violencia ha alcanzado niveles preocupantes a pesar de la declaratoria de emergencia. Según informes de medios locales, en la provincia de Virú, donde se ha llevado a cabo un bloqueo de carretera, se han reportado cinco asesinatos recientes en localidades como Víctor Raúl, Chao y Carmelo. Estos incidentes reflejan una ola de violencia persistente que afecta a los habitantes de la zona.
Hasta las primeras semanas de octubre, el Sistema Nacional de Defunciones (Sinadef) ha registrado un total de 198 homicidios en la región. Esta cifra alarmante pone de manifiesto la gravedad de la situación de inseguridad que se vive en La Libertad. A pesar de las medidas de emergencia implementadas, los actos violentos continúan ocurriendo, generando preocupación entre la población.
La provincia de Virú ha sido uno de los focos principales de esta violencia, con varios asesinatos reportados en un corto período. La situación ha llevado a las autoridades a intensificar los esfuerzos para controlar la inseguridad y proteger a los ciudadanos. Sin embargo, los desafíos persisten, y la comunidad sigue enfrentando el temor y la incertidumbre ante la posibilidad de nuevos actos violentos.