El exministro del Interior Miguel Hidalgo, antiguo jefe de la Dirección Antidrogas (Dirandro) de la Policía Nacional (PNP), ha confirmado su acercamiento con el presentador de televisión Andrés Hurtado, a pesar de sus nexos con el narcotráfico y su implicancia en una red de tráfico de influencias, lavado de activos y sobornos por la que enfrenta 18 meses de prisión preventiva.
“Soy un hombre que suele ser amigo en las buenas y en las malas. (...) El señor no es mi amigo, pero es un conocido al que le tengo aprecio”, dijo en una entrevista difundida este domingo por Cuarto Poder. Hidalgo, vinculado a los fundadores de las empresas a través de las cuales el presentador facturó en publicidad, negó saber por qué Hurtado mostraba interés en él.
“La verdad no lo sé”, señaló sin descartar visitarlo en el penal de Lurigancho, donde se encuentra recluido. El dominical publicó un conjunto de chats en los que el conductor propuso al exalcalde del Callao, Juan Sotomayor —actualmente en juicio por organización criminal—, incluir a Hidalgo en la lista de candidatos al Congreso, invitación que finalmente fue descartada.
De acuerdo con el reportaje, ambos se conocieron a través del empresario Abraham Mina, propietario de una empresa que facturó casi tres millones de soles en anuncios para el programa del presentador. “He sido yo el gestor para que ellos se conozcan, dado que es parte de mi gente”, confirmó Mina. No obstante, Hidalgo manifestó su desconocimiento sobre las invitaciones: “De repente (fue) Abraham Mina (quien nos presentó). (¿Cómo así lo convoca?) No lo sé”, indicó.
El empresario fundó la empresa Minalgo S.A.C., la cual fue manejada posteriormente por Hidalgo y su hijo. Otro nombre que se suma a esta trama es Patricia Cieza, socia de Mina en Basmala S.A.C., compañía que, según fuentes citadas por el dominical, facturó miles de dólares para Hurtado.
En 2022, Cieza dejó la firma para convertirse en gerenta corporativa de Minalgo, aunque su vinculación laboral con el exministro data de 2019, de acuerdo con el perfil de LinkedIn de la involucrada. En abril de 2021, Hidalgo y Cieza acudieron al despacho de Roxana del Águila, exjefa de la Superintendencia Nacional de Migraciones y también allegada a Hurtado.
El exministro declaró que aquella cita “fue para conocer” la sede, sin brindar detalles claros sobre la motivación del encuentro ni quién lo invitó. En los últimos días, los lazos entre Hurtado y el narcotráfico han cobrado mayor relevancia. Según El Comercio, al menos desde 2015, el presentador mantenía relación con Paul Zorrilla, detenido con 4 kilos de droga en 1991.
Recientemente, Panorama reveló que el conductor viajó a Nueva York para asistir al cumpleaños de Christian Olivo González, alias ‘Chicho’, presunto líder del cartel ‘La Gran Manzana’, un gran caso de narcotráfico destapado en 2009, cuando se descubrieron casi cuatro toneladas de cocaína en latas de alcachofas.
Hurtado ha visitado EE.UU. al menos 65 veces y, desde 2019, es apoderado de Demetrio Chávez Peñaherrera, alias ‘Vaticano’, uno de los mayores capos del narcotráfico en Perú en los años 90. El Grupo Especial de Inteligencia Orión, la unidad de la Dirandro, investiga si Hurtado ha gestionado las propiedades de ‘Vaticano’ para actividades ilícitas, según La República.
El excapo le otorgó poder para manejar sus bienes, después de salir de prisión. El conductor supuestamente aceptó esta responsabilidad a sabiendas de que los bienes tenían origen en el narco. Incluso sus hijas, radicadas en Estados Unidos, estarían en la mira de la Agencia Antinarcóticos de Estados Unidos (DEA), quienes exhiben un lujoso estilo de vida que ha levantado sospechas sobre el origen de sus recursos.
“He sido director antidrogas, conozco lo que es eso”, comentó Hidalgo cuando fue consultado al respecto. Al preguntarle si le preocupaban estas relaciones, respondió: “Créame que ni pensaba. No conocía eso”. En cuanto a ‘Vaticano’, dijo: “Por supuesto (que lo sé), ese tema es una casuística en la lucha antidrogas”.
Actualmente, Hurtado enfrenta investigaciones simultáneas por dos despachos del Ministerio Público. Una fiscalía investiga si estuvo involucrado en lavado de activos, mientras que la Segunda Fiscalía Suprema Transitoria se centra en sus presuntas operaciones junto a la magistrada Elizabeth Peralta, quien podría haber solicitado un millón de dólares para devolver un cargamento de oro incautado al empresario Javier Miu Lei en 2020. Ambos procesos tienen un plazo de ocho meses, pero solo el segundo ha sido declarado “complejo”.