El 16 de mayo, Juan José Santiváñez Antúnez se convirtió en el ministro del Interior y asumió el liderazgo del orden interno del país. Sin embargo, durante los 156 días que ya lleva en el cargo se han cometido más de 730 homicidios y 9 mil denuncias por extorsiones en diversos sectores y rubros, lo que ha ocasionado el rechazo de la población que viene organizándose para realizar marchas y paros nacionales para exigir, además de su renuncia, acciones más efectivas de gobierno de Dina Boluarte y su lucha contra la criminalidad.
Las cifras del Sistema de Información de Defunciones (Sinadef), citadas por el noticiero 24 Horas, generan gran preocupación entre los congresistas, principalmente de centro e izquierda, que vienen rechazando la gestión de Santiváñez desde antes de la entrada en vigencia del estado de emergencia decretado en 14 distritos de Lima que parece no tener efectos contra la criminalidad.
“Las cifras son indetenibles. El señor no sabe qué hacer respecto al tema de seguridad. Plantea un conjunto de cosas para barajar si le funciona o no. No hay ningún tipo de planificación”, indicó el congresista Jaime Quito, de la bancada Socialista, y lamentó que en el parlamento no se llegue a un consenso para impulsar su censura.
“El Congreso no puede ser cómplice de un ministro que hoy está llevando al vilo al país en cuanto a seguridad ciudadana”, añadió.
Sin embargo, congresistas de otras bancadas como Fernando Rospigliosi, de Fuerza Popular, opinan distinto y consideran que Juan José Santiváñez tendría que permanecer en el cargo al menos hasta después del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que se llevará a cabo en Perú del 10 al 16 de septiembre y que reunirá a mandatarios y otras autoridades de América y Asia.
“Estamos a tres semanas de la APEC. No puedes cambiar al ministro del Interior, cambiar al director de Inteligencia, al viceministro; porque ahí hay amenazas de todo tipo, amenazas de delincuencia, amenazas de terrorismo internacional, movilizaciones sociales. Ahorita no”, dijo el parlamentario a Willax.
Los ‘errores’ de Santiváñez
No solo las cifras sobre criminalidad empañan la gestión de Santiváñez. El ministro del Interior, al intentar dar cifras que respalden el supuesto éxito del estado de emergencia, ha dado cifras falsas y en el caso más reciente ha preferido no mostrarse ante la prensa.
Este mes, luego de un fuerte discurso contra la desinformación, Santiváñez mencionó que la reducción del sicariato y extorsiones en lo que va de la declaratoria de emergencia es del 72%; sin embargo, esta cifra dada de forma oficial es errónea, pues se trata de un 7,2%.
“Efectivamente, de repente porque lo leí o lo referí muy rápido, es 7,2%. No recuerdo haber dicho 72%, [...] pero reitero que el trabajo que estamos haciendo es un trabajo medido regularmente”, mencionó al ser consultado sobre la data que destacó como un logro de su gestión.
El error más reciente fue presentar, en varios canales de televisión, a Iván Quispe Palomino como el número dos de Sendero Luminoso y como un gran logro del estado de emergencia, pero luego, especialistas en terrorismo cuestionaron dicha presentación indicando que el capturado no era un miembro activo y que más bien era un colaborador de la justicia y que hace más de 10 años se venía desempeñando como albañil.
Pese al error, el ministro del Interior, así como el premier Gustavo Adrianzén, continuaron afirmando que se trataba, ya no del número dos de Sendero, sino un requisitoriado por terrorismo. Tres días después de la detención, Iván Quispe Palomino fue liberado al comprobarse que no tenía ninguna requisitoria pendiente. El ministro del Interior no ha vuelto a dar entrevistas en público hace dos días y el Mininter, en su cuenta de X, tuvo que borrar el post donde presentaban la captura del supuesto “número 2 de Sendero Luminoso”.