El Aeropuerto Internacional Jorge Chávez enfrenta un panorama incierto respecto a su fecha de apertura. Aunque el Gobierno de Dina Boluarte había proyectado su inauguración para enero de 2025, la concesionaria Lima Airport Partners (LAP) ha adelantado la fecha al 18 de diciembre de este año. Sin embargo, la Asociación de Empresas de Transporte Aéreo Internacional (AETAI) ha expresado preocupaciones sobre la viabilidad de esta nueva fecha, advirtiendo que las condiciones actuales no son adecuadas para una apertura tan pronta.
Uno de los principales problemas señalados por Carlos Gutiérrez, gerente general de AETAI, es el tráfico y congestionamiento vehicular que podría generarse debido a que los accesos al aeropuerto se encuentran en la avenida Morales Duárez, conocida por su alto flujo de camiones de carga. Además, el puente Santa Rosa, que será la única vía de ingreso al aeropuerto, no estará listo hasta 2026, y actualmente no cuenta con un expediente técnico, según un informe de Cuarto Poder.
En ese panorama, el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), tomó como medida temporal, la decisión de instalar dos puentes modulares, pero estos han sido criticados por los vecinos debido a la saturación vehicular que generan.
Graves problemas de ingreso y salida
Gutiérrez en conversación con RPP, advirtió que 90 mil personas podrían movilizarse por esa única entrada, lo que incrementaría el problema del tráfico y seguridad en la zona.
“Es seguro que vamos a tener problemas de tráfico y congestionamiento, y a eso sumemos los problemas de inseguridad (...) La experiencia para el turista y los trabajadores va a ser compleja”, sostuvo.
En este contexto, también se mostró en contra de la decisión de LAP de adelantar la fecha de inauguración. El gerente de AETAI señala que este cambio coincide con la temporada alta, lo que podría generar riesgos significativos debido a posibles interrupciones en el servicio.
“La fecha ha sido determinada por LAP. Eso nosotros estamos cuestionando. Esta fecha del 18 de diciembre, que está en plena temporada alta (por Navidad y Año Nuevo), conlleva a riesgos asociados muy graves si es que ocurre alguna disrupción en el servicio por cualquier evento que se pueda dar”, agregó para el mencionado medio.
Además, cuestionó la decisión de LAP de fijar la apertura en plena temporada alta, lo que podría conllevar riesgos significativos si ocurre alguna disrupción en el servicio.
El representante de AETAI recordó que existe un acuerdo firmado entre el MTC y LAP que establece el inicio de operaciones para el 30 de enero de 2025. Este acuerdo fue suscrito el 29 de abril de 2022.
“Esto no deberíamos discutirlo, simplemente el MTC debe cerrar el tema y decir que se traslada al 30 de enero como está acordado y punto, y trabajar con eso y estar tranquilos, y en la eventualidad de que existan inconvenientes, tanto internos como externos, que no hagan que se inaugure ese fecha, se pudiese postergar (...)”, sostuvo.
En ese sentido, el gerente de AETAI enfatizó que Perú necesita un nuevo terminal aéreo, pero subrayó que no debe ser uno que inicie operaciones “a trancas y a patadas”.
Fuga de agua
Por otro lado, destacó que es habitual que surjan contratiempos, como la reciente fuga en el sistema de abastecimiento de agua que afectó al terminal el 14 de octubre. Aunque lo ideal sería resolver estos problemas antes del inicio de operaciones, advirtió que la apertura podría retrasarse más allá de la fecha acordada debido a factores internos o externos.
“Son cosas que van a ir pasando y está bien que se vayan arreglando en la previa al inicio de operaciones […]. El problema es que no va a existir una marcha blanca, porque el planteamiento que está presentando el aeropuerto es el 17 de diciembre, el último apaga la luz y seis horas después se inicia operaciones en el nuevo terminal”, comentó al mismo medio.