Un viejo dicho dice que “por mejoría, mi casa dejaría”, una frase que ha resonado en el corazón de muchos peruanos que, ante la búsqueda de un futuro más prometedor, han decidido dejar su país natal. Y es que en las últimas décadas, las historias de amigos y familiares que optan por la migración se han vuelto cada vez más comunes.
Es por eso que desde 2006, cada 18 de octubre se celebra el Día de los Peruanos que Residen en el Exterior, una conmemoración que honra a quienes, desde lejos, mantienen viva la identidad nacional.
No es nuevo
La migración no es un fenómeno reciente. Históricamente, el Perú ha sido un crisol de movimientos poblacionales, con flujos migratorios que datan de hace más de un siglo.
Según Teófilo Altamirano, autor de “Los peruanos en el exterior y su revinculación con el Perú” (2010), el país ha atravesado diversas etapas que han configurado el panorama actual.
Desde la década de 1920, Perú se convirtió en un destino atractivo para migrantes, especialmente de Europa, quienes buscaban refugio y oportunidades tras la Primera Guerra Mundial. Durante este período, los peruanos que se aventuraban al viejo continente eran considerados privilegiados, muchos provenientes de la elite limeña.
Sin embargo, en la década de 1950, las tornas cambiaron y comenzó a evidenciarse un creciente número de compatriotas que se embarcaban hacia Estados Unidos, un país en pleno auge económico. Al mismo tiempo, un grupo de jóvenes universitarios fijó su mirada en París (Francia), buscando educación y nuevas experiencias.
Se van todos
En la década de 1970, la migración se democratizó. Ya no era exclusiva de las clases acomodadas; estudiantes y trabajadores de la clase media empezaron a explorar nuevas oportunidades en el extranjero.
Estados Unidos seguía siendo el destino favorito, aunque Canadá comenzó a ganar relevancia como un lugar atractivo para establecerse. Desde entonces, el fenómeno migratorio no ha hecho más que crecer, abarcando todas las capas sociales del Perú.
Los últimos dos años han marcado una ola de migración sin precedentes. Muchos peruanos, enfrentando riesgos extremos, se han aventurado a ingresar a Estados Unidos de manera ilegal en busca de mejores oportunidades.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), hasta 2021, más de 668,000 peruanos residían en EE.UU., seguidos de 252,000 en España y 238,000 en Chile.
Contribución al Perú
El Día de los Peruanos en el Exterior no solo es una celebración, sino también una oportunidad para visibilizar la contribución de los emigrantes a la cultura y economía del país.
En este contexto, el INEI ha publicado un informe sobre las características sociodemográficas de los peruanos en el extranjero.
Según este, 3,3 millones de peruanos viven fuera de sus fronteras, un 9,3% de los nacidos en la patria. De estos, el 32,7% busca mejorar su situación económica, mientras que el 27,2% lo hace por motivos familiares.
El perfil del migrante peruano revela que más del 52% opta por viajar en avión, mientras que el 46,9% elige la vía terrestre. Los puntos de salida más comunes son el aeropuerto internacional Jorge Chávez y las fronteras con Chile y Bolivia.
A pesar de que muchos peruanos se establecen en ciudades con grandes comunidades de compatriotas, como Buenos Aires y Santiago, lugares como Nueva Jersey han cobrado notoriedad por albergar barrios con un ambiente familiar y acogedor para quienes han dejado su tierra.
La migración peruana es un reflejo de la resiliencia y la búsqueda constante de mejores horizontes. Mientras tanto, aquellos que permanecen en el país continúan observando cómo sus seres queridos forjan nuevos destinos, llevando consigo la riqueza cultural que caracteriza a la nación.