La presidenta Dina Boluarte insistió este martes en calificar la inseguridad ciudadana como una forma de “terrorismo”, al reforzar su postura de mano dura contra el crimen organizado. En su discurso por la conmemoración por el Combate de Angamos y aniversario de la Marina, la jefa de Estado indicó que la migración de grupos delictivos ha sido consecuencia de la “destrucción de países y gobiernos fallidos”, en clara alusión a Venezuela.
“Es imperativo que hagamos el esfuerzo de unirnos y derrotar el nuevo terrorismo criminal que, en el afán de obtener dinero ilícito por medio de la extorsión y el asesinato, está quitándole la vida a los peruanos y destruyendo sus bienes materiales. Es una amenaza a nuestra patria la presencia de bandas criminales internacionales que, actuando solas o unidas a criminales peruanos, buscan echar raíces en nuestra patria”, señaló.
Boluarte agregó que, ante la migración de las bandas criminales a América y Europa, “es necesario que todas las instituciones del Estado y la sociedad” se unan para impedir que el país se transforme en un espacio dominado por la delincuencia. “Estamos en lucha contra este nuevo terrorismo que amenaza nuestros hogares y busca destruir el tejido social mediante el miedo, derramando sangre”, siguió.
La gobernante destacó “la resiliencia del Perú” y aseguró que el país saldrá victorioso ante la amenaza del “terrorismo criminal de la delincuencia” en un contexto de “recuperación económica y baja inflación”, posición que, según sus declaraciones, le ha permitido destacarse en América Latina.
“No podemos permitir” que la ola criminal socave estos esfuerzos, agregó desde el Callao, donde un ataque a una combi dejó en la víspera cuatro muertos, incluidos una menor, tras un enfrentamiento originado por un delincuente que abrió fuego contra el chofer.
Boluarte ya había responsabilizado a los migrantes de la criminalidad el año pasado, cuando afirmó que “lamentablemente están cometiendo” actos delictivos y abogó por reformular la ley de extranjería. “Ustedes mismos son los que transmiten todos los días (...) que quienes cometen a diario asaltos, robos y demás actos delincuenciales son extranjeros”, dijo a los periodistas en una rueda de prensa. Sin embargo, sus afirmaciones no se sostienen en los datos oficiales.
Actualmente, once distritos de Lima y uno en el Callao están bajo estado de emergencia por 60 días debido a la ola de delitos de extorsión que afecta a la capital. La medida fue anunciada tras el paro de asociaciones de transportistas, ya que en las últimas semanas al menos tres conductores fueron asesinados como resultado de esta creciente criminalidad.
El Ejecutivo ha presentado un proyecto de ley que clasifica como “terrorismo urbano” los delitos de extorsión, secuestro y sicariato, e incluye modificar varios artículos del Código Penal “a fin de fortalecer las acciones de lucha contra la inseguridad ciudadana”, para lo que propone un endurecimiento de las penas como la cadena perpetua si quien comete este tipo de delitos pertenece a las Fuerzas Armadas o a la Policía Nacional.
“Terrorismo de imagen”
En su mismo discurso, Boluarte emitió un enérgico llamado a combatir la “guerra de las mentiras”, a la que se refirió como una nueva amenaza global, y advirtió sobre el peligro que representan las fake news, creadas con el propósito de hacer “terrorismo de imagen”.
Según la mandataria, esta estrategia es un “viejo método que aplicaron los totalitarios con su lema ‘miente, miente, que algo queda’”, ahora reforzada por el uso extendido de las redes sociales. De igual modo, denunció que “algunos se dedican a mentir en la búsqueda de crear inestabilidad”, lo que genera un entorno desfavorable que podría “obstaculizar el crecimiento económico del país”.