⁠Extorsionadores hacen explotar bomba dentro de colectivo de empresa que se niega a pagar cupos de S/50 mil

En una noche de terror en Barranca, un atentado perpetrado por la organización criminal ‘Norte chico nueva generación’ ha dejado a los ciudadanos en estado de alerta. El ataque se ejecutó cuando una moto con dos ocupantes lanzó un objeto explosivo contra un vehículo estacionado.

La explosión destrozó el automóvil y generó una onda expansiva que hizo estallar las ventanas de una casa contigua, evidenciando la peligrosidad de estos grupos que operan con impunidad, de acuerdo con información de ATV Noticias Edición Central.

La violencia que caracteriza a esta banda delictiva siembra el miedo entre los habitantes de la zona. Según testigos, el ataque es parte de una serie de extorsiones que se intensifican en los últimos meses, donde los dueños de colectivos que realizan la ruta Lima-Barranca son sus principales objetivos. Se les exige el pago de 50 mil soles bajo la amenaza de represalias, que en muchos casos han incluido ataques violentos.

Las amenazas no son solo palabras vacías; están diseñadas para causar pánico y obligar a las víctimas a ceder ante las exigencias de la organización criminal. El clima de inseguridad se extiende, y los trabajadores temen por sus vidas y las de sus familias.

La situación llevó a los transportistas a exigir que sean incluidos en el estado de emergencia que el gobierno ha declarado en Lima. “Las provincias estamos totalmente descubiertas”, lamentó un representante del sector en conversación con el citado medio de comunicación.

“La Policía Nacional sabe dónde están cada uno de estos paraderos y los identifica, pero no quieren accionar”, agregó. De acuerdo con el transportistas, esta falta de respuesta por parte de las autoridades ha exacerbado la frustración de los ciudadanos, quienes sienten que su seguridad está en riesgo.

Mientras tanto, la organización ‘Norte chico nueva generación’ continúa operando sin ser molestada. La sensación de impotencia crece entre los trabajadores del sector, quienes temen que esta ola de violencia se expanda aún más si no se toman medidas efectivas. “Si la situación sigue igual, advierten que habrá un paro nacional”, señalaron.

Según la Policía Nacional del Perú (PNP), la Central 111 es una línea gratuita y anónima que estará operativa las 24 horas del día, los 365 días del año.

La División de Secuestros y Extorsiones (Divise) será la encargada de gestionar esta línea. Su equipo especializado brindará orientación a las víctimas sobre las medidas a seguir para resguardar su identidad y la de sus seres queridos.

La Central 111 estará conectada a la Central de Emergencias 105 y podrá recibir imágenes, audios y videos que la ciudadanía comparta como evidencia para facilitar las investigaciones. Además, la información será evaluada por el Grupo Operativo de Respuesta Inmediata a la Extorsión (Gorex).

La actividad de los extorsionadores ha evolucionado en los últimos años, adoptando diversas modalidades que se ajustan a las circunstancias y vulnerabilidades de sus víctimas.

• Cobro de cupos: En esta modalidad, los extorsionadores demandan pagos periódicos a cambio de “protección” o para permitir la continuidad de negocios o actividades laborales.
• Chalequeo: Consiste en ofrecer una “protección” a cambio de dinero, amenazando a la persona con que, si no se realiza el pago, ella o su negocio podrían ser atacados.
• Supuestos secuestros o accidentes: Aquí, se contacta a la víctima para informarle que un familiar ha sido secuestrado o ha sufrido un accidente, exigiendo un pago para su liberación o atención médica.
• A través de redes sociales: Plataformas como Facebook, X e Instagram se han convertido en herramientas clave para los extorsionadores, quienes utilizan la información que encuentran en los perfiles de las víctimas para amenazarlas o intimidarlas.