Hospital Real San Andrés, el nosocomio de 475 años que esconde entre sus escombros un legado histórico, criptas y entierros humanos

A medio milenio de su fundación, el Hospital de San Andrés revela historias de sanación, cuidado y prácticas funerarias olvidadas por el tiempo

Los cambios, a través de los años, del hospital San Andrés. (Composición El Peruano)

En el corazón del centro histórico de Lima, se alzan las venerables ruinas del Hospital Real de San Andrés, un monumento que lleva más de cuatro siglos guardando secretos de la historia médica y cultural del Perú. Fundado hace 475 años, este nosocomio no solo representa el inicio de la atención sanitaria en Sudamérica, sino que también es el guardián de historias ocultas que esperan ser desveladas.

Además de su notable contribución a la medicina en tiempos coloniales, algunos descubrimientos arqueológicos han revelado la existencia de criptas y entierros humanos, abriendo una ventana a un capítulo poco conocido de su legado.

Situado en un entorno que comparte con antiguos centros de enseñanza médica y otros hospitales icónicos, el Hospital de San Andrés aguarda en silencio nuevas exploraciones que podrían redefinir la historia conocida hasta ahora. La superposición de épocas y funciones que ha tenido este edificio invita a sumergirse en un viaje por el tiempo, donde cada esquina podría develar sorprendentes hallazgos. La combinación de su función original, sus transformaciones a lo largo de los siglos y los recientes hallazgos arqueológicos debería ser suficiente para provocar el interés de historiadores, arqueólogos y curiosos por igual.

¿Cómo ha perdurado el Hospital Real de San Andrés a lo largo de los siglos?

La Municipalidad de Lima halló los restos algunas huellas en el hospital San Andrés. Foto: Andina
Aunque ya no cumple funciones hospitalarias, sus estructuras antiguas resisten el paso del tiempo en un rincón del centro histórico de Lima, ofreciendo pistas sobre su glorioso y variado legado. Hoy en día, el sitio es objeto de estudios arqueológicos y análisis históricos que buscan preservar y entender mejor su importancia cultural.

Este histórico hospital también acoge un legado multifacético que abarca desde su función original como centro de atención médica hasta su rol en el cuidado de la salud mental. Además, los recientes hallazgos arqueológicos de entierros humanos subrayan su integración en las prácticas funerarias coloniales. Propuestas actuales sugieren su transformación en un museo que narre su rica historia, para así consolidar su lugar en el contexto cultural del país como una reliquia que continúa lo que despierta interés y reverencia.

¿Cuál fue el origen y propósito del Hospital Real de San Andrés?

El Hospital Real de San Andrés fue fundado en 1552 con el propósito de cuidar a los más necesitados, ejerciendo una función de caridad cristiana durante el periodo colonial. Francisco Molina, un hombre conocido por su devoción, desempeñó un papel central en esta iniciativa. El hombre llevaba esperanza a los enfermos más vulnerables del Callejón de Santo Domingo. La idea de brindar un lugar propicio para una muerte digna reflejaba las creencias de la época, donde los botiqueros proveían cuidados, y los médicos solo hacían visitas ocasionales.

Con el respaldo del virrey Andrés Hurtado de Mendoza, el hospital se consolidó como la primera institución médica de Sudamérica, lo que simbolizó un faro de compasión y fe. Este entorno no solo atendía a pacientes en necesidad de cuidados urgentes sino también actuaba como un centro de medicina para casos más severos, estableciendo un precedente en la atención hospitalaria de la región.

El lugar se convirtió en un convento. En este convento, se dice que se creó un postre elaborado por las monjas en una plancha de mármol que anteriormente había servido como la mesa de autopsias del hospital. Créditos: Wikipedia

¿Qué papel jugó el hospital en el cuidado de la salud mental?

El Hospital Real de San Andrés también fue pionero en el tratamiento de la salud mental, al contar con un área conocida como “loquería”. A pesar de las condiciones rudimentarias, se consideraba uno de los lugares más avanzados para la época. Casimiro Ulloa notó que aunque la higiene y vigilancia en la loquería eran mejores respecto a otras instalaciones, había mucho margen de mejora.

Con el tiempo, sin embargo, las condiciones de cuidado fueron criticadas y vistas como inhumanas, esto incitó a reformas. En 1853, el médico Miguel E. de los Ríos dirigió un informe a la Sociedad de Beneficencia Pública para apelar a un trato más humano para los pacientes psiquiátricos. Esto finalmente llevó a la creación del Hospital Civil de la Misericordia, conocido como el Hospicio del Cercado, este hecho marcó un cambio significativo en la atención a la salud mental en el país.

¿Cómo han impactado los hallazgos arqueológicos recientes en la historia del hospital?

Excavaciones arqueológicas han desenterrado un cementerio colonial con más de 40 entierros humanos en el predio del antiguo hospital, se reveló una cripta subterránea datada de tres siglos. Estos descubrimientos ofrecen un nuevo vistazo a las prácticas funerarias y de salud pública de la época. Antonio Coello, arqueólogo a cargo de estas exploraciones, ha destacado la importancia de estos hallazgos para comprender mejor los ritos y costumbres del periodo colonial en Lima.

IInfobae Perú pudo conocer que la Municipalidad Metropolitana de Lima mantiene las placas retiradas en un almacén al interior de la sede del Hospital San Andrés a la espera de ser respuestas a su ubicación original cuando se tengan mejores condiciones de seguridad. (Foto: Infobae Perú)

Además, se ha explorado la hipótesis de la existencia de momias incas en las inmediaciones del hospital, un aspecto que ha intrigado a la comunidad histórica y arqueológica. Aunque la probabilidad de su conservación es incierta, debido a factores como la humedad y el paso del tiempo, los esfuerzos de búsqueda continúan, prometiendo potencialmente más descubrimientos que podrían redefinir la narrativa histórica de la región.

<br/>