En medio del debate para la aprobación del dictamen sobre el delito de terrorismo urbano en el pleno del Congreso de la República, Pasión Dávila, parlamentario de la Bancada Socialista, denunció ser víctima de los extorsionadores.
Durante su intervención, el legislador lamentó la ola de delincuencia, y el incremento del crimen organizado, que azota a la ciudadanía. Además, llamó a la reflexión a sus homólogos y que se tenga “cuidado” de criminalizar las protestas y manifestaciones con la polémica ley.
“Hace meses estoy siendo extorsionado, yo mismo. Y eso no es correcto, colegas. Lamentablemente, la delincuencia ha llegado a las esferas más alejadas o más seguras de nuestro país. En ese sentido, tenemos que ser contundentes y drásticos contra los verdaderos extorsionadores y delincuentes”, dijo a los presentes.
“Pero tenemos que tener cuidado. Mucha gente en una situación de movilización que quiera hacer su justo reclamo, no creo que deban de ser castigados. Hay que tener mucho cuidado. Por eso invoco a consensuar y dialogar, que exista el debate de todo nivel. Eso nos ayudará a solucionar este problema”, agregó.
Ni bien dejó de hablar Dávila, la congresista Vivian Olivos, de Fuerza Popular, tomó la palabra y recordó que ella también es víctima de las amenazas de una organización criminal que le exige el pago de cupo.
“Lamentablemente, uno se siente como un ciudadano más. Uno que, siendo congresista, goza de una seguridad, padece de extorsión. (...) Hoy nuestra presidenta de la República goza de total seguridad y un mundo de policías que las resguardan”, indicó la parlamentaria naranja.
Otros congresistas extorsionados
En noviembre del 2023, la ahora primera vicepresidenta de la Mesa Directiva, Patricia Juárez, denunció que delincuentes le exigían el pago de hasta 10 mil soles mensuales. Según la Policía Nacional del Perú (PNP), tras revisar las pruebas entregadas, indicaron que solo era un grupo de fachada.
“Somos de la legión Oder, cuídese y ya sabe, ya sabemos dónde vive, es decisión de usted si quiere que muera un familiar, nosotros ya dimos nuestra advertencia”, se escucha en un audio enviado a Juárez Gallegos por un individuo que supuestamente era integrante de la banda Odarteam de Brasil.
En declaraciones a la América Televisión, la legisladora de Fuerza Popular manifestó que ella no era la única extorsionada por la aparente organización criminal. “Al parecer era una extorsión en masa, o sea, pasaban a muchos el mismo texto. A los pocos días la congresista Vivian Olivos también me hizo conocer que le habían llegado estos mensajes”, indicó.
En tanto, en mayo de este año, el congresista Héctor Acuña, de Honor y Democracia, denunció que le solicitaban S/ 35 mil soles a cambio de no dejar explosivos en una de las sedes de su institución educativa y poner en riesgo a la comunidad.
Según sus declaraciones, las amenazas a su colegio privado Bruning, situado en Trujillo, capital de la región La Libertad, iniciaron el último 30 de marzo. “A fines de marzo, llegaron dos mensajes. De ahí, ya quedó todo tranquilo, silencio, hasta que recién, hace unos días, ha llegado otro mensaje y por eso nuevamente se ha reactivado la denuncia. Esperemos que esta vez la Policía realmente haga su trabajo que corresponde”, demandó el legislador en RPP.