La española Cepsa ha salido oficialmente del Lote 131, ubicado entre Huánuco y Ucayali, mediante una modificación de contrato que deja a la empresa Petrotal como garante corporativo.
Mediante el decreto supremo N° 019-2024-EM, el Ministerio de Energía y Minas (Minem) autoriza a la agencia estatal Perupetro a modificar el Contrato de Licencia para la Exploración y Explotación de Hidrocarburos en el Lote 131.
Esta modificación de contrato del Lote 131 se ejecuta a efectos de “reflejar la sustitución de la Compañía Española de Petróleos S.A. (Cepsa) Unipersonal por Petrotal Corp. como garante corporativo en el contrato en mención”, detalla el documento hoy oficial en el Diario El Peruano.
De esta manera, la agencia estatal Perupetro queda expedita para suscribir el nuevo contrato con la canadiense Petrotal, que ya maneja el Lote 95 de Loreto desde 2017.
Antes de llegar a este acuerdo, la transferencia recibió el visado de distintas instancias del sector energético, como la Dirección de Exploración y Explotación de Hidrocarburos de la Dirección General de Hidrocarburos del Minem.
Ahora, le corresponde a Perupetro iniciar los trámites para la llegada de Petrotal. Se tienen que resolver algunos capítulos legales, como la minuta, escritura pública y garantía corporativa, para luego suscribir la modificación final. Fuentes del sector explicaron a Infobae Perú que el proceso no debería tardar más de algunos días.
Petrotal y su tridente petrolero
El campo Los Ángeles del Lote 131 tiene una producción estimada en 900 barriles de crudo pesado por día (bpd), los cuales se sumarán a los más de 14.363 bpd que, en promedio, produjo el Lote 95 en manos de Petrotal en agosto. Antes Petrotal ya ha orillado los 20.000 bpd.
Se calcula la existencia de unos 4,9 millones de barriles de petróleo en las entrañas del Lote 131. Su cercanía con el Lote 95 ha sido otro de los factores de competencia estudiados por Petrotal, que antes salió de carrera por el Lote 8, hoy en manos de Upland.
Guillermo Flórez, gerente general de Petrotal, manifestó en su momento que la compañía de capitales canadienses y estadounidenses planes inmediatos para reactivar la producción en el Lote 131, con miras a mejorar su posición en el Perú hacia el año 2030.
A las mejoras en los campos de Bretaña del Lote 95, Petrotal también espera concluir sus tareas de exploración en las áreas de Osheki-Kametza y Constitución Sur del Lote 107, su otro activo, ubicado entre Huánuco y Pasco. Pudo acceder a este segundo tras la absorción de Petrolífera Petroleum del Perú.
Vale precisar que la operación para la compra del Lote 131 ascendió a unos US$5 millones, en medio de un proceso de desinversión de Cepsa en distintos activos fósiles en mercados de la región, entre ellos, el Perú.
Cepsa apuesta por las energías verdes
El plan de desinversiones parece haberle salido bien a Cepsa. Luego de reportar pérdidas por US$8 millones en en el primer trimestre del 2024 -para dicho periodo, había perdido US$297 millones en 2023-, la compañía perteneciente a los fondos Mubadala y Carlyle ha experimentado un notable incremento en su EBITDA, alcanzando los 1.099 millones de euros en el primer semestre de 2024.
Esta cifra representa un aumento significativo en comparación con los 742 millones de euros registrados en el mismo periodo de 2023. Este crecimiento en el EBITDA refleja una mejora en la rentabilidad de la compañía, que se traduce también en un beneficio neto de 168 millones de euros en los primeros seis meses de 2024.
Este resultado positivo contrasta con las pérdidas de 393 millones de euros que Cepsa sufrió durante el primer semestre de 2023. La recuperación financiera de la empresa se debe a una serie de estrategias implementadas para optimizar sus operaciones y mejorar su eficiencia en un entorno económico desafiante, sobre todo en línea con las denominadas “energías verdes”, entre ellas, el hidrógeno.
Cepsa también ha acordadp vender su división de gas licuado Gasib en España y Portugal a una unidad de la chilena Empresas Copec, abre una nueva pestañapor 275 millones de euros (US$302,42 millones). Además de Perú, Cepsa ya se desprendió de otros activos en Emiratos Árabes Unidos y Colombia, por ejemplo.