El Poder Judicial declaró fundado el pedido de 18 meses de prisión preventiva contra el presentador de televisión, Andrés Hurtado, más conocido como ‘Chibolín’, por ser el presunto coautor de la comisión de los delitos contra la administración pública, en la modalidad tráfico de influencias y cohecho en agravio del Estado.
El juez Juan Carlos Checkley Soria consideró el pedido del Ministerio Público debido a que existiría riesgo de fuga, ya que Hurtado no proporcionó arraigo laboral, ni un domicilio fijo, por lo que ordenó su detención hasta marzo de 2026.
El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) resolverá en que penal de Lima será recluido Hurtado. El presentador se encuentra en el complejo policial del Cercado de Lima a la espera de la decisión.
Hasta ese lugar llegó el abogado adjunto de Hurtado, el doctor Percy Sampén, quien señaló que su defendido probablemente sea trasladado hasta Ancón II, donde, de acuerdo al procedimiento, se hará la clasificación del penal, que será hoy.
“Ahora me voy a entrevistar el señor Andrés y después voy a dar declaraciones. (¿Sigue acá?) Sí, sigue acá, voy a conversar con él en estos momentos y salgo en unos minutos a dar declaraciones. Primero converso con él. A mí me informaron que sigue acá. (¿La clasificación el INPE va a demorar un poco) Va a ser hoy, pero más tarde”, declaró.
Unos minutos después, llegó Elio Riera, el abogado titular de Andrés Hurtado, quien indicó que están a la espera de la decisión del INPE, pero van a apelar el fallo judicial.
Por otra parte, la fiscal Elizabeth Peralta y el empresario Augusto Miu Lei deberán cumplir comparecencia con restricciones y el pago de una caución.
En el caso de la suspendida fiscal, deberá pagar una caución de S/35 000, mientras que el empresario deberá pagar la suma de s/ 1 millón.
Pidió afrontar proceso en libertad
Durante las audiencias, el polémico presentador de televisión no pudo convencer al magistrado de su arraigo familiar y laboral, pese a que presentó pruebas como la propiedad de inmuebles en el distrito de Surco y su trabajo en Panamericana Televisión. Sin embargo, estas evidencias fueron desestimadas por Checkley Soria, quien no las consideró suficientes.
Uno de los momentos más controvertidos durante la intervención de Hurtado, fue cuando no respondió datos básicos de su vida diaria y se justificó diciendo que no recordaba su número celular ni la dirección de su residencia. Además, se mostró incapaz de ofrecer una cifra exacta de sus ingresos mensuales, lo que generó dudas en el tribunal. Ante estas inconsistencias, el presentador de televisión atribuyó sus fallos de memoria a su hiperactividad y déficit de atención, explicando que estas condiciones le dificultan retener cierta información.
Asimismo, recordó su amplia carrera en televisión y los diferentes servicios sociales que brindó a través de su programa. “En 33 años de carrera, es la primera vez que tengo un tema serio de esta naturaleza. En mi programa, durante diez años, nunca hemos visto jerarquías ni razas para ayudar a alguien. Hemos regalado sillas de ruedas, operaciones, siempre que he podido ayudar con mis canjes y mis posibilidades, hasta en el propio COVID-19″.
En otro momento, pidió afrontar su proceso en libertad, debido a que tiene una hija de nueve años, a quien debe cuidar.
“Señor juez, me gustaría afrontar un juicio justo en libertad porque tengo una niña de nueve años (...) Nunca en mi vida se me ha ocurrido por mi cabeza (realizar actos ilícitos) porque tengo trabajo actualmente y me han contratado en Cirtramef S.A.C. como gerente de relaciones públicas, sabiendo que podía tener este problema”, alegó.