Subsidios estatales para vivienda caerían a su peor nivel desde 2009, pero precios de renta se mantienen estables hace 7 años

Los desembolsos de créditos hipotecarios con recursos del Fondo MiVivienda, que otorga el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS) en favor de la población que tiene problemas para encontrar un hogar, podrían caer a su peor nivel desde 2009, informó la Cámara Peruana de la Construcción (Capeco).

De acuerdo a un reciente análisis del gremio constructor, el número de créditos desembolsados con recursos del Fondo Mivivienda podría instalarse sobre los 6.948 en 2024, si tomamos como referencia la tendencia de los últimos seis meses. Pero, si usamos la referencia del promedio de los últimos cinco, se podrían alcanzar los 8.179.

En cualquiera de los dos escenarios, los créditos de vivienda que otorgue este año el Estado no podrían superar los 8.456 que se otorgaron en 2010, por lo que este segmento anotaría su peor retroceso en quince años. Vale precisar que, en 2009, solo se colocaron 4.810, un escenario base bastante bajo.

En este sentido, Capeco refirió que el Bono Familiar Habitacional (BFH) que otorga el Estado peruano para aliviar a las familias sin hogar se reduciría en +10,2% en 2024 (17.401 hasta agosto), respecto al 2023 (29.053).

La peor caída se daría para la modalidad de Construcción en Sitio Propio, pues de los 19.872 que se alcanzaron durante todo el 2023, solo vamos 9.552 entre enero y agosto del 2024. Los créditos para Adquisición de Vivienda Nueva sí están por cumplir su meta.

Además, el desembolso de Mivivienda Verde también se redujo en +3,1% en los últimos doce meses. Así, los créditos Mivivienda Tradicional se contrajeron en +25,1%, mientras que los de Techo Propio lo hicieron en 43,8%.

Agosto tampoco contribuyó mucho, pues en el octavo mes del año los créditos del Fondo Mivivienda anotaron su peor resultado de últimos tres años, y acumularon desde enero un retroceso de +31,1% respecto a similar periodo del 2023.

Desde la vereda contraria, no existen demasiadas posibilidades para las familias peruanas. El gremio constructor reveló que el precio promedio de renta o alquiler en nuestro país se mantiene estable respecto al umbral de los últimos siete años, con un promedio mensual de US$15,8 por metro cuadrado hasta el segundo trimestre del 2024.

Además, mientras los créditos otorgados por el Estado peruano retrocedieron en número de 13.494, entre agosto del 2022 y julio del 2023, a solo 9.537, entre agosto del 2023 y julio del 2024 (un retroceso de -29,3%), los créditos hipotecarios colocados por la banca comercial, en este mismo periodo de análisis, pasaron de 21.106 a 25.653 (+21,5%).

Si lo queremos ver el monto de créditos colocados, entre agosto del 2022 y julio del 2023 se habían alcanzado los S/2 millones 470.009 desde el sector público, pero este mismo segmento retrocedió entre agosto del 2023 y julio del 2024 hasta el S/1 millón 695.599.

Sin embargo, en el lado privado el crecimiento fue de +26,5% entre agosto del 2023 y julio del 2024, con la colocación de S/10 millones 813.329, frente a los S/8 millones 549.765 del anterior periodo anualizado de comparación. Los bancos no perdieron, pese a que las políticas monetaris restrictivas del BCRP en la primera mitad del año.

Guido Valdivia, director ejecutivo de Capeco, señaló que, aunque el reciente repunte en el sector construcción es alentador, persiste la incertidumbre.

Hasta agosto de 2024, el PBI de este sector registró un crecimiento del 4,8%, una notable recuperación tras meses de estancamiento. Este crecimiento ha sido impulsado por un aumento del 20,1% en la obra pública.

Sin embargo, estimaciones privadas sugieren un crecimiento ligeramente mayor, del 3,7%, basado en el desempeño de las asociaciones público-privadas (APP), las obras por impuestos, la inversión minera y la venta de vivienda no social.

A pesar de la recuperación observada en 2024, el crecimiento no es suficiente para revertir los resultados negativos del año anterior. Vale mencionar que el sector construcción experimentó, en 2023, una caída de casi 8% por la desaceleración económica y las restricciones derivadas de la pandemia.