Un cadáver envuelto en llamas fue descubierto en la zona de los Pantanos de Villa, en Chorrillos, distrito del sur de Lima. Un transeúnte reportó el hallazgo la noche del martes 17 de septiembre, según la Policía Nacional del Perú (PNP).

La persona que encontró el cuerpo circulaba por una vía oscura y poco transitada frente a los Pantanos de Villa, al cruzar la avenida Defensores del Morro. El cadáver, aún ardiendo y maniatado, habría sido encendido minutos antes, según las primeras investigaciones policiales.

Miembros de la comisaría de Mateo Pumacahua acudieron de inmediato y acordonaron la zona a la espera de los peritos de Criminalística y del fiscal de turno. El caso fue asignado al Departamento de Investigación Criminal de Chorrillos (Depincri), el cual se encargará de esclarecer las circunstancias del asesinato y la identidad de la víctima.

Por el momento, se desconoce el motivo detrás del brutal crimen, pero las autoridades han iniciado una investigación exhaustiva para dar con los responsables. Fuentes de la PNP informaron a RPP Noticias que el cadáver podría corresponder a un hombre de unos 30 años, aunque esto aún no ha sido confirmado oficialmente.

La aparición de un cadáver en llamas ha generado una gran preocupación entre los residentes de Chorrillos. Los vecinos han solicitado un refuerzo en el patrullaje del área, especialmente en las zonas menos iluminadas, debido al temor a otros delitos. La comunidad ha subrayado la necesidad urgente de mejorar la seguridad en la localidad.

Este incidente ha resaltado los desafíos de seguridad en zonas oscuras y poco transitadas de Chorrillos, convirtiéndose en un punto de atención tanto para las autoridades como para los residentes, quienes buscan prevenir hechos similares en el futuro y garantizar un entorno más seguro para todos.

La Defensoría del Pueblo de Perú ha instado al Ministerio del Interior (Mininter) y a la Policía Nacional a reforzar la División de Investigación y Búsqueda de Personas Desaparecidas mediante una reestructuración que permita ampliar su competencia a nivel nacional y aumente su presupuesto. Este llamado a la acción se produce en un contexto alarmante: en los primeros dos meses del 2024, se reportaron 3.295 personas desaparecidas en el país.

La gravedad de la situación es evidente, con un aumento del 29,6% en comparación con el mismo periodo del año anterior, cuando se registraron 2.541 casos. De las personas desaparecidas, más de la mitad aún no han sido localizadas, subraya la Policía Nacional. Este incremento pone en evidencia una tendencia preocupante que afecta en mayor medida a mujeres y menores de edad, quienes representan una parte significativa de estos casos.

Lima, con 1.220 denuncias, es la región que encabeza las estadísticas de desapariciones, seguida de Cusco, Arequipa y Junín, que también muestran una alta incidencia. Dentro de esta trágica cifra, las adolescentes de entre 12 y 17 años son el grupo más vulnerable, acumulando un total de 1.640 casos. Esto representa el 54,4% del total de mujeres y menores desaparecidos durante los meses de enero y febrero de este año.

El creciente número de desapariciones ha provocado que tanto la Defensoría del Pueblo como otras organizaciones demanden una respuesta más específica, inmediata y coordinada por parte del Estado. Se busca que la División de Investigación y Búsqueda de Personas Desaparecidas tenga capacidades ampliadas y recursos suficientes para hacer frente a esta crisis de manera eficaz y oportuna.

Estos son los contactos de urgencia que brindan las instituciones del Estado ante casos de crimen, accidentes, fenómenos naturales y otros

• Policía Nacional del Perú: 105
• Bomberos: 116
• Emergencia Policía Carreteras: 110
• Defensa Civil: 115