Petroperú continúa en crisis, a pesar de los anuncios de restructuración dados por el presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén. Recientemente, el directorio de la empresa estatal renunció argumentando falta de urgencia por parte del Gobierno para remediar la situación crítica en la que se encuentran.
El exministro de Energía y Minas de Alberto Fujimori, Amado Yataco Medina, indicó a Infobae Perú que, desde su perspectiva, Petroperú debe ser liquidado o puesto en manos de privados, además de que la Constitución solo asigna un rol subsidiario cuando la inversión privada no tiene interés.
Precisamente, una de las propuestas del poder Ejecutivo para reflotar la compañía es que una PMO extranjera privada se encargue de cambiar la administración. Esta compañía gestora de proyectos, según Adrianzén, tendría que ser seleccionada en el mercado internacional.
“Nosotros consideramos que Petroperú sigue siendo una empresa que en este momento tiene a su cargo la responsabilidad de atender un mercado que no es cubierto íntegramente por la iniciativa privada, me estoy refiriendo fundamentalmente a las zonas altoandinas y a las zonas marginales de nuestra Amazonía”, mencionó el presidente del Consejo de Ministros.
¿A cuánto asciende la deuda?
Adrianzén también reconoció que otra de las problemáticas de la compañía es el financiamiento. “El hecho cierto es que Petroperú en este momento se encuentra en una situación en la que ha adquirido una serie de deudas significativamente grandes que requiere medidas absolutamente inmediatas y drásticas”, aseveró.
De acuerdo con la Sociedad de Comercio Exterior del Perú, la deuda supera los 8.532 millones de dólares, de los cuales, 4.468 millones vencen este año, según sus estados financieros.
Por su parte, Energinas sostiene que si bien las últimas cifras oficiales, aunque no editadas, presentan un pasivo total de 8.339 millones de dólares, número superior a la deuda del cierre de 2022, que fue de 7.289 millones de dólares.
Asesor culpa a Dina Boluarte
Un informe del semanario Hildebrandt en sus Trece reveló que la presidenta Dina Boluarte cambió hasta tres veces de opinión respecto a cómo debería gerenciarse Petroperú.
De acuerdo con el medio, la jefa de Estado inicialmente apoya la propuesta de contratar a una PMO (Oficina de Gestión de Proyectos) para hacer cambios en la administración. No obstante, la mandataria informó a los ministros de Energías y Minas, Rómulo Mucho; y Economía, José Arista, que esto ya no se iba a realizar y que se iba a financiar directamente a la empresa.
El semanario de investigación indica que este cambio en el parecer de Boluarte habría sido influencia por el exministro de Energía y Minas, Óscar Vera. Sin embargo, luego de las críticas de gremio empresariales, volvió a cambiar su postura y decidió que la PMO siga adelante.
Boluarte solo había pedido renuncia del director
El martes 10 de septiembre presentaron su renuncia en bloque Oliver Stark, Germán Boza Pró, David Tuesta, Carlos Villalobos y Pedro Gamio, siendo este último quien fungió como vocero ante los medios para explicar la decisión. El único miembro restante es Antonio Manosalva, representante de los trabajadores cuyo nombramiento sigue un proceso distinto.
“El Directorio, nombrado por la Junta General de Accionistas (JGA) de Petroperú, ha estado alertando al gobierno desde el inicio de su gestión sobre la insostenibilidad financiera que enfrenta la empresa. Se les ha reiterado que es necesario tomar la mejor decisión respecto al futuro de la compañía”, afirmó el grupo liderado por Oliver Stark a través de un comunicado.
Anteriormente, Carlos Linares, expresidente de Petroperú, fue inhabilitado por la Contraloría General de la República para ejercer un cargo público a principios de 2024. De esta manera, Stark quedó como su sucesor.