La congresista de Fuerza Popular, Rosangella Barbarán, envió un oficio al Ministerio de Relaciones Exteriores para conocer las medidas que tomará esta cartera ante un posible éxodo de ciudadanos bolivianos. Esta solicitud la hizo a raíz de que la consultora Gas Energy Latin America anticipara que más de un millón de personas de este país vendrían al Perú debido a una crisis energética que están viviendo.
“Solícito con carácter de urgencia nos informe sobre las medidas que implementará su despacho para evitar el éxodo boliviano, tales como: la exigencia de visa a ciudadanos bolivianos u otros requisitos de ingreso”, escribió en la misiva dirigida al canciller Elmer Schialer Salcedo.
En su carta, la parlamentaria acusa a la migración de colapsar los servicios básicos. “Nuestros hospitales no se dan abasto y los padres de familia hacen largas colas para alcanzar una vacante en los colegios públicos”, afirma.
¿Qué sucede en Bolivia?
Según Gas Energy Latin America, en la región existe una “acelerada declinación de producción de gas natural y líquidos asociados”, debido a una falta de inversión en la exploración en dólares que YPFB, empresa estatal Boliviana, no tiene cómo asumir.
“Bolivia no tiene la posibilidad de traer inversión privada como la tiene Perú. Se recomienda al Perú no caer en los mismos errores de Bolivia del estado empresario y continuar con el modelo de inversión privada”, precisó en entrevista con Infobae Perú el titular de la consultora, Álvaro Ríos.
Sostuvo, además, que el famoso ‘milagro boliviano’ sucedió porque en el 2006, cuando se nacionalizó el gas y elevaron al 85% lo que el Estado obtiene, el país comenzó a exportar esta sustancia a Argentina y Brasil. Así, ganaron los dólares suficientes como para masificar el recurso por medio de ductos.
Álvaro Ríos, quien también es exministro de Hidrocarburos de Bolivia, aseveró en diálogo con Canal N que su país sí podría quedarse sin gas natural.
“Eramos exportadores grandes de energía, esa fue la charla que hice en la sociedad peruana de hidrocarburos, y les dije que el modelo peruano tenía que continuar con inversiones privadas, para seguir buscando gas y petróleo porque quedarse sin energía era muy duro. Entonces, Bolivia transita de ser un país exportador de gas, exportador de GLP al Perú, exportador de condensado, y estamos ahora importando una gran cantidad de energía, porque ni hemos hecho nuestra tarea exploratorio”, explicó.
Además, recordó las diferencias que existen entre los modelos económicos de Bolivia y Perú, respecto a que uno es más dependiente del Estado y el otro del sector privado.
“En Perú, el empresario es privado, vienen de nuevas inversiones, de inversiones extranjeras directas y viene tambien de inversiones nacioanles. En cambio en Bolivia y en Venezuela, el modelo estatista es el que prevalece. Esa es la comparación que hice y por eso me permití decir que si el modelo boliviano no se ajusta y no se cambia profundamente, podría empezar una migración, porque son exactamente las mismas condiciones económicas, con escazes de combustible, con escases de energía. Lo único que hace es matar empleo, matar empresa y generar más pobreza, y cuando hay pobreza, la gente huye a los países vecinos, como ha pasado en el caso venezolano”, señaló.
Finalmente, dijo que en el país vecino se ha “matado a la empresa privada que quería actuar”, poniendo elevados impuestos y muchas trabas en general.
“(Creyeron) que el Estado empresario, o la empresa estatal, podía realizar esta actividad por sí sola. El tiempo nos ha dado la razón y Bolivia va a continuar pasando por una profunda crisis energética que ciertamente va a debilitar más su economía”, opinó.