‘Los Da Vinci del Jorge Chávez’: así operaba la banda criminal que falsificaba pasaportes por 8 y 12 mil dólares a indocumentados

De acuerdo con la Policía Nacional del Perú, entre el 2023 y 2024 pudieron “amasar más de un millón de dólares”, teniendo en cuenta que cobraban miles de dólares por este servicio ilegal

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Los delincuentes cobraban miles de soles para falsificar estos documentos a extranjeros - crédito composición Infobae / Panamericana
Los delincuentes cobraban miles de soles para falsificar estos documentos a extranjeros - crédito composición Infobae / Panamericana

La Policía Nacional del Perú (PNP) logró detener a tres sujetos que serían miembros de ‘Los Da Vinci del Jorge Chávez’, una banda criminal que se encargaba de falsificar pasaportes por 8 y 12 mil dólares.

“Es una red criminal internacional dedicada al tráfico ilícito de migrantes, a la falsificación de migrantes, a la falsificación de pasaportes”, dijo a Panamericana, el coronel PNP José Manuel Cruz, jefe de la División de Investigación de Estafas y otras defraudaciones.

La organización tuvo ganancias abultadas, entre el 2023 y 2024. “En un año pueden amasar más de un millón de dólares”, indicó el vocero.

De acuerdo con la Policía Nacional, Mateo Moisés Mallqui Juipa, alias ‘El Chino’, de 64 años, sería el líder de la banda, que incluso tiene nexos en Europa, América del Norte, Centro y Asia.

Los criminales tenían todos los implementos necesarios para realizar esta labor - crédito Panamericana
Los criminales tenían todos los implementos necesarios para realizar esta labor - crédito Panamericana

También formaría parte César Alberto Castro Carbonel, más conocido como ‘El viejo’, de 71 años, quien era el dueño de un local ubicado en la cuadra 2 del jirón Ocoña, en el Centro Histórico de Lima. En este lugar, la Policía encontró 117 pasaportes, cédulas y documentos identidad robados. Otra pieza clave es Mauricio Octavio García, alias ‘cara de perro’, quien se encargaba de la falsificación de los documentos.

En la vivienda de ‘El Viejo’, en San Martín de Porres, habría relojes y celulares de alta gama, sellos policiales, tintas especiales, además de miles de soles y dólares.

¿Cómo operaba la banda?

‘Los Da Vinci del Jorge Chávez’ brindaban un servicio que incluía no solo documentos falsos, sino también la forma en que se podía burlar los controles de seguridad del aeropuerto internacional Jorge Chávez.

En San Juan de Lurigacho se pudo hallar los instrumentos: aplicativos de diseño gráfico, impresoras de alta resolución, lectores, lentes de aumento, escáneres, insumos químicos y tintas invisibles.

- crédito Panamericana
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La Policía indica que otra forma de cometer este delito era llevar personalmente los pasaportes al extranjero. ‘El chino’, por ejemplo, registra 122 salidas del país. Estos destinos son Chile, Estados Unidos, Ecuador, Argentina, Bolivia, Colombia, brasil, España, Italia, Países Bajos, Rusia, Marruecos y Venezuela, donde acudió más de 50 veces.

“Tienen movimientos migratorios de un día, de dos días. Tienen más de 100 movimientos, es porque estos sujetos también se encargaban de ir y coordinar con estas personas que serían integrantes de estas organizaciones criminales, para ayudarlos a salir”, sostuvo José Manuel Cruz.

Ecuatoriano fue su último cliente

Su último cliente fue un joven ecuatoriano que logró llegar a Madrid, España, a través de este método ilegal. Las cámaras de seguridad del aeropuerto pudieron captar cómo lograron vulnerar los controles.

En las imágenes se ve al ‘coyote’ ingresar con el cliente para explicarle la ruta que debe seguir. Entraron por la puerta 10, subieron por las escaleras eléctricas para llegar al patio de comidas y luego a la puerta de embarque.

- crédito Panamericana
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Luego, ambos se retiran y salen por la puerta 5. El día del viaje, se encontraron en un hotel ubicado en la avenida Tomás Valle. Luego, Denver Contento, regresó para subir al avión.

Cuando entra a la zona de embarque, sigue el camino habitual para llegar al arco de control de equipaje de mano. Denver cruza todos los controles con su pasaporte ecuatoriano original. Cuando entra a la zona de embarque, sigue el camino habitual para llegar al arco de control de equipaje de mano, por lo que solo debe sacar sus pertenencias para que pasen por el scaner. Una vez en el área internacional, se dirige a la puerta del vuelo para ir a España.

“Simula que se va a su país, pasa todos los controles, tanto los de seguridad, como migración, porque se controla con su pasaporte auténtico. Después, estando en la zona de la sala de embarque, no aborda la sala de embarque 26 que lo llevaría de retorno a Quito, sino que aborda la puerta 19, vuelo de Iberia con destino a España”, mencionó el coronel PNP. Hace la cola en loa puerta y logra cruzar gracias a que otra persona distrae a la encargada del counter.

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