Descubre los cinco mejores tipos de anticucho en Perú, según Taste Atlas

Desde la antigua tradición inca hasta las recomendaciones modernas, el platillo tradicional hecho con corazón de res sigue siendo un símbolo de la cocina peruana. Explora las distintas opciones y descubre qué hace especial a cada una

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Los deliciosos y tradicional anticucho.
Los deliciosos y tradicional anticucho. (Taste Atlas)

En el ámbito de la gastronomía peruana, el anticucho se presenta como uno de los platos más representativos. Su preparación a la parrilla, su aroma y sabor inconfundible han llevado a este manjar a ser un símbolo culinario tanto dentro como fuera de las fronteras peruanas. La historia del anticucho remonta sus raíces a tiempos precolombinos, cuando las comunidades andinas utilizaban carne de llama para sus preparaciones.

Con la llegada de los colonizadores españoles, el plato evolucionó hasta convertirse en lo que es hoy, empleando principalmente corazón de res. Hoy en día, el portal Taste Atlas lo reconoce como uno de los exponentes más destacados de la cocina nacional. A continuación, te mostramos los cinco tipos de anticuchos más consumidos del Perú, tal como fueron destacados por el portal gastronómico, cada uno con una identidad propia que refleja la diversidad cultural y culinaria del país.

Tipos de anticuchos

  • Anticucho de corazón
Anticucho, choncholí, choclo y ají
Anticucho, choncholí, choclo y ají carretillero. (Foto: Captura AComer.pe)

El anticucho de corazón es la versión clásica y posiblemente la más reconocida. Se elabora con corazón de res, cortado en pequeños cubos que se ensartan en brochetas. La marinada juega un rol fundamental en la preparación de este plato. Se mezclan ajos, comino, orégano y ají panca, permitiendo que la carne absorba estos sabores antes de llevarse a las brasas. El resultado es una carne tierna, impregnada de un sabor ahumado y ligeramente picante.

En las calles de Lima, este tipo de anticucho es un plato tradicional, servido con rodajas de papa dorada y choclo. Las salsas, especialmente la de ají amarillo, añaden una capa adicional de intensidad a la experiencia gustativa. Es común ver largas filas de comensales esperando por una porción caliente servida al instante. Este platillo es muy querido por los peruanos debido a su historia y origen inca. Además, con una calificación de 4.5 en Taste Atlas, se posiciona como uno de los favoritos a nivel internacional.

  • Anticucho de pescado
Anticucho de pescado (Taste Atlas:
Anticucho de pescado (Taste Atlas: salmon kebab)

El anticucho de pescado ofrece una alternativa fresca y ligera. Este tipo de anticucho suele prepararse con pescados de carne blanca, como la corvina o el lenguado, para asegurar una textura adecuada al asarse en la parrilla. La marinada, similar a la del anticucho tradicional, incorpora jugo de limón, pimentón, y una pizca de comino, otorgando un toque ácido que resalta el sabor del pescado.

La cocción es breve, buscando una textura jugosa que no pierda firmeza. Esta variante es común en ciudades costeras, donde la frescura del mar se refleja en cada bocado. Al servirse, el anticucho de pescado mantiene la tradición de las papas y el choclo, pero algunos restaurantes optan por incluir salsas menos picantes, como la de rocoto, para equilibrar los sabores.

  • Anticucho de pollo
Anticucho de pollo cultivado, elaborado
Anticucho de pollo cultivado, elaborado por José Andrés (GOOD Meat)

El anticucho de pollo, viene ganando terreno en la gastronomía peruana. Las pechugas de pollo se cortan en trozos uniformes y se marinan con una mezcla de ajos, comino y ají panca, similar al aderezo del anticucho tradicional. Al ser asados, los trozos de pollo adquieren un exterior crocante que contrasta con la suavidad interna. Su popularidad se debe, en parte, a que es una opción menos pesada que el anticucho de corazón, lo que lo convierte en una alternativa apreciada por aquellos que prefieren evitar las carnes rojas.

  • Anticucho de pulpo
Anticucho de pulpo. (Panchita)
Anticucho de pulpo. (Panchita)

El anticucho de pulpo es quizás una de las versiones más sofisticadas y exclusivas de este plato. Preparado con tentáculos de pulpo previamente cocidos hasta lograr una textura suave, luego se marinan en una mezcla de ajo, vinagre y aceite de oliva. La cocción en la parrilla le otorga una caramelización ligera que realza la dulzura natural del pulpo, convirtiéndolo en un plato delicado, pero lleno de sabor. Esta variante es cada vez más común en los restaurantes de alta gama en Lima, donde los chefs buscan reinterpretar platos tradicionales con ingredientes inesperados. Los acompañamientos suelen ser similares a los del anticucho clásico, aunque en algunos casos, se opta por alternativas más ligeras, como ensaladas frescas o rodajas de camote.

  • Anticucho de suri
Anticucho de Suri. (Andina)
Anticucho de Suri. (Andina)

Desde la Amazonía peruana llega una versión exótica del anticucho, el anticucho de suri. El suri, una larva extraída de los árboles de aguaje o palmito, es un ingrediente clave en la gastronomía de las regiones selváticas. Después de ser limpiadas cuidadosamente, las larvas se marinan en sal y ajo, antes de ser asadas a la parrilla. El resultado es una textura crujiente por fuera y suave por dentro, ofreciendo una experiencia completamente distinta a la de los otros tipos de anticucho.

Aunque su consumo es más popular en la selva, el anticucho de suri ha comenzado a ganar notoriedad en otras regiones del Perú, especialmente entre los turistas en busca de experiencias gastronómicas inusuales. Servido con plátano frito o yuca, este plato desafía las convenciones tradicionales del anticucho y resalta la diversidad cultural del país.

Los cinco mejores restaurantes de anticuchos en Perú, según Taste Atlas

El anticucho, uno de los
El anticucho, uno de los platos que se forjó desde las cocinas más humildes en el Perú. (Andina)

El portal Taste Atlas no solo enumera los diferentes tipos de anticucho, sino que también ofrece una lista de los mejores lugares para degustar este plato en el Perú. Anticuchos de la Tía Grimanesa, ubicado en Miraflores, lidera la lista con su inigualable autenticidad y sabor, mientras que Panchita, también en Miraflores, se destaca por su interpretación moderna del anticucho. En Barranco, El Tío Mario representa la tradición más pura, mientras que Pachapapa en Cusco ofrece una experiencia única en un ambiente histórico. Finalmente, Restaurant La Parra en Chiclayo se suma como un lugar emblemático en la región norte del país.

Cada uno de estos establecimientos ofrece una visión diferente del anticucho, adaptada a su contexto regional y estilo culinario, pero manteniendo siempre el respeto por la tradición y la calidad. Este recorrido por los cinco mejores lugares para comer anticucho en el Perú refleja no solo la popularidad del plato, sino también su capacidad de evolucionar sin perder su esencia.

Origen ancestral

Anticucho. Captura de imagen: AComer.pe
Anticucho. Captura de imagen: AComer.pe

Antes de la llegada de los conquistadores, los incas ya contaban con preparaciones que empleaban carnes como la de llama, condimentadas con hierbas y ajíes. Con la colonización, la introducción del ganado vacuno marcó un cambio significativo en la dieta de los habitantes locales. El anticucho, en particular, se convirtió en una preparación popular entre los esclavos, quienes aprovechaban las vísceras que no eran consumidas por las clases dominantes. Con el tiempo, los sabores y técnicas se perfeccionaron, llevando a este plato a ser uno de los favoritos de la cocina popular.

A lo largo de los siglos, el anticucho ha mantenido su relevancia en la cocina peruana, evolucionando y adaptándose, pero siempre conservando su esencia. Las carretillas de anticuchos son un testimonio viviente de esta historia, presentes en cada rincón del país y brindando a locales y visitantes una experiencia auténtica de la comida peruana.

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