Desde el jueves 29 de agosto, el poderoso tifón Shanshan viene causando estragos en la isla principal de Kyushu, al suroeste de Japón, con lluvias torrenciales y vientos de más de 100 km/h. Hasta el momento, se registraron 3 muertos, 82 heridos y un desaparecido.
Ante tal panorama, las autoridades niponas recomendaron a las personas evacuar el lugar, que está poblado, aproximadamente, por millones de habitantes. Aunque, en las últimas horas, este fenómeno perdió fuerza, la Agencia Meteorológica de Japón advirtió que se podrían presentar fuertes vientos, olas altas y lluvias significativas en la mayor parte del país.
Trascendió que las grandes precipitaciones que viene soportando Kyushu ha provocado la crecida de ríos e inundaciones, mientras que las fuertes ráfagas de viento han derribado árboles, arrojado autos contra las paredes y roto las ventanas de algunos edificios.
Casi un cuarto de millón de hogares se quedaron sin electricidad y, por lo menos, 40 edificios resultaron dañados, de acuerdo al grupo de trabajo de gestión de desastres de la prefectura. Producto de ello, 20.000 personas se refugiaron en centros comunitarios municipales, gimnasios escolares y otras instalaciones de la isla.
¿Hay peruanos en peligro?
Infobae Perú pudo conocer que, hasta la publicación de este texto, el Ministerio de Relaciones Exteriores (RR.EE.) no tiene reporte de peruanos afectados por el tifón Shanshan. Sin embargo, se encuentran en constante seguimiento de la emergencia a través de todos los consulados en el país asiático.
De acuerdo a información del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (Minjusdh), hasta el 2018, en Japón viven casi 50 mil peruanos, siendo la región de Kanto donde se concentra la mayor cantidad de diáspora.
Posibles consecuencias
Los funcionarios meteorológicos y gubernamentales están en alerta máxima debido a la amenaza que representa la tormenta Shanshan, que se desplaza lentamente por el archipiélago japonés en dirección noreste.
Este fenómeno meteorológico, que ha generado gran preocupación, podría causar daños significativos en las próximas jornadas, especialmente a medida que avanza hacia zonas más densamente pobladas. La posibilidad de que se produzcan más inundaciones y deslizamientos de tierra mantiene a las autoridades en constante monitoreo.
Aunque el impacto de la tormenta aún no llega a la región de Tokio, en donde la actividad diaria continúa sin mayores alteraciones, se espera que en los próximos días la situación cambie drásticamente.
El titular del Ministerio de Gestión de Desastres de Japón, Yoshifumi Matsumura, advirtió sobre el potencial destructivo de Shanshan, calificándola como una tormenta capaz de generar “niveles sin precedentes” de vientos violentos, olas altas, marejadas ciclónicas y lluvias intensas.
En una reunión del grupo de trabajo, celebrada el pasado miércoles 27 de agosto, Matsumura hizo un llamado urgente a la población, especialmente a las personas mayores, para que no duden en buscar refugio ante cualquier indicio de peligro
Como parte de las medidas preventivas, se cancelaron cientos de vuelos nacionales que conectaban ciudades e islas del suroeste, y se suspendieron los trenes bala junto con algunos servicios de trenes locales. En las áreas más afectadas de la isla principal de Honshu, donde las lluvias ya son intensas, se implementaron acciones similares.
Además, los servicios postales y de entrega en la región de Kyushu quedaron suspendidos, y supermercados y otras tiendas han anunciado cierres temporales para garantizar la seguridad de empleados y clientes.