La ministra de Vivienda, Hania Pérez de Cuéllar, viajó a Juliaca para dar inicio a un proyecto de agua y saneamiento. Durante su alocución sorprendió con un discurso religioso, en el que invocó a los asistentes a rezar por las autoridades a fin de que no cedan a tentaciones de corrupción, el cual rápidamente se viralizó.
“Dios está con nosotros porque estamos trabajando por el bien de todos. ¿Seguirán criticando? sí, aprovechando los errores porque los habrá. Van a provocar conflictos, van a mentir, pero yo les digo ahora con seguridad y firmeza: no nos van a detener. [...] Con todas las piedras que nos tiren seguiremos construyendo el camino de la dignidad para Juliaca. Yo les pido con profunda humildad que oren, que recen por todas las autoridades para que no flaqueemos, para que no seamos tentados en robar y sigamos trabajando con la frente en alto. En el nombre de Dios y de los apus declaro este proyecto bendecido”, expresó.
En otro momento de su discurso, hizo alusión a las protestas contra el gobierno de Dina Boluarte. Consideró que con la realización de la obra se inicia “una etapa de reconciliación, de respeto y esperanza”.
“Hoy se acaba una etapa donde había desconfianza, miedo, cólera, frustración, pero sobre todo olvido por parte del Estado. Hoy juntos creamos una nueva historia, y cuando digo juntos me refiero a las autoridades, técnicos, dirigentes, Sedajuliaca y todos los que estamos involucrados”, expresó la ministra ante las autoridades locales y beneficiarios.
Asimismo, se refirió a los críticos de su gestión. Mencionó que la desconfianza, insultos, abucheos y mentiras los hicieron más fuertes. “Eso nos unió. Sus críticas nos hicieron mejores y este proyecto también los beneficia a ellos, porque a pesar de sus críticas ustedes también tendrán agua y desagüe”, sostuvo.
Luego, destacó la labor de la jefa de Estado. “Si no hubiera sido por su decisión política, hoy no estaríamos aquí. Son USD 700 millones de dólares los que se han aprobado para que estos proyectos se hagan realidad. Es el proyecto más grande de agua y saneamiento del Perú y se está haciendo en Puno, en Juliaca. Hoy es un día histórico que todos recordaremos”, expresó.
Sostuvo que se cumplieron todos los compromisos del acta suscrita en abril de 2024, como la rehabilitación de vías, la capacitación a vecinos con cursos de Sencico, la instalación de la Unidad Coordinadora de Proyectos (UCP), entre otros.
“Nos han obligado a venir”
De acuerdo a declaraciones recopiladas por La República, varios pobladores denunciaron que fueron obligados a acudir al evento, bajo multa. “No tenían otra opción más que aceptar el proyecto de la ministra porque necesitaba de este proyecto, pero no habría perdón ni olvido”, indicó la reportera.
“La ministra como ofender ha venido. Está retando parece. No se ha hecho justicia, no nos hemos olvidado porque ella está con una deuda. Plata ha tenido para matar a nuestros hermanos, pero para hacer agua hasta ahora nada. En eso si quieren discutir, como buena ha venido. A nosotros no nos gusta, pero Dios hará justicia en aquel cielo”, declaró una de las asistentes identificada como Rosa.