MEF informó que no entregará “ni un solo sol” de presupuesto a Petroperú, inmersa en la quiebra

El ministro de Economía y Finanzas (MEF), José Arista, informó este miércoles que el Gobierno no entregará “ni un solo sol” del presupuesto público contemplado para el 2025 a Petroperú, la firma estatal que ha planteado la posibilidad de aceptar la quiebra o liquidación debido a la grave crisis que atraviesa.

En una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, el titular del MEF señaló que su cartera no prevé brindar ningún tipo de ayuda, ya que le generaría incomodidad que se utilice dinero proveniente de los impuestos para darle liquidez a una firma que ha admitido su insostenibilidad.

“Son los recursos de los contribuyentes los que nos permiten financiar la ley de presupuesto y, por lo tanto, téngalo por seguro que nosotros enviaremos este proyecto de ley de presupuesto al Congreso y ahí se verificará que no se compromete ni un solo sol de los contribuyentes para financiar una empresa que está con estos problemas que usted ha mencionado”, enfatizó.

Arista adelantó que convocaría a una reunión después de que la junta general de accionistas de la compañía explicara que el sobreendeudamiento ha deteriorado al extremo sus ratios de solvencia y liquidez. “Entiendo la preocupación de ellos. Tenemos la urgencia de ocho barcos que están en las costas por llegar para desembarcar el petróleo. Le hemos pedido a ellos que hoy en la reunión nos traigan toda la información para una toma de decisión más informada”, agregó.

Si esos barcos no descargan, habría desabastecimiento interno y alza de la gasolina, como ocurrió en octubre de 2022. En ese momento, la empresa informó que había 11 buques en el litoral peruano que aguardaban para descargar combustible, la preparación de productos en las refinerías y plantas, y los traslados terrestres y vía cabotaje a las plantas de venta que tiene la empresa estatal en todo el país.

La cita en Palacio de Gobierno ocurrió este jueves y participaron el jefe del Gabinete Ministerial, Gustavo Adrianzén, el ministro Arista y el presidente del directorio de Petroperú, Oliver Stark. El objetivo del encuentro, que se extendió por aproximadamente tres horas, fue discutir y definir el futuro de la empresa. Al culminar, los asistentes optaron por retirarse sin brindar declaraciones a la prensa.

Petroperú, que opera desde 1969, es una de las empresas que más factura en el país y en 2022 su cifra llegó a los 21,244 millones de soles (unos 5,676 millones de dólares). En junio pasado, Stark reveló que el directorio había aprobado ocho medidas para evitar el quiebre definitivo, entre las que se destaca el abandono del edificio principal en la Av. Paseo de la República, en el distrito limeño de San Isidro, y la mudanza masiva del personal a Talara, donde se ubica el complejo de refinación de crudo.

“De todas maneras, vamos a salir del edificio, vía concesión o venta. Deberíamos irnos todos a Talara, aunque con algunas excepciones, como el área legal o el área de compras. Quizás un grupo se quede en una oficina acá, pero sería en un solo piso que alquilaríamos al concesionario”, agregó. Actualmente, 600 trabajadores están en Lima y 900 en la región norteña. El traslado —mencionó entonces— está programado entre enero y marzo de 2025.