Extorsiones y ataques armados paralizaron transporte público: buses ‘El Chino’ dejaron de circular de Puente Piedra a VES

Los conductores de aproximadamente un centenar de buses de la empresa Etuchisa, de la famosa línea ‘El Chino’, que cubren la ruta A entre Puente Piedra y Villa El Salvador, han decidido este miércoles 21 de agosto no operar tras una serie de atentados y extorsiones. La paralización del servicio se da en respuesta a un reciente ataque armado que dejó daños significativos en una de las unidades de transporte, informaron a América Noticias.

Los trabajadores de Etuchisa comunicaron que los dueños de la empresa no han proporcionado las garantías necesarias para su seguridad laboral. Ayer, cerca de las 7 de la noche, dos delincuentes llegaron hasta el paradero en La Ensenada, en el distrito limeño de Puente Piedra, y dispararon contra uno de los buses, causando daños en las ventanas y otras partes del vehículo. Este ataque es el segundo en menos de una semana.

Uno de ellos, que prefirió mantener el anonimato, expresó al noticiero diurno su preocupación: “No hay quien nos proteja, nosotros tenemos hijos, tenemos familia y hay temor de que nos maten. Hasta el momento nadie de la empresa se ha pronunciado ni se ha acercado”, expresó un trabajador, quien también dio cuenta de la ausencia de efectivos policiales, pese a que cerca de la compañía hay una comisaría distrital.

El jueves de la semana anterior, otro autobús fue atacado cerca del malecón Chillón a las 5 p.m., según declaraciones de los trabajadores, en ese momento los atacantes manifestaron que su objetivo era la empresa y no los conductores. Sin embargo, la incertidumbre y el temor persisten ante la falta de respuestas de los propietarios de la empresa y la ausencia de vigilancia policial, a pesar de la cercanía de la comisaría.

Los choferes aseguran desconocer si los dueños de Etuchisa están siendo extorsionados directamente, pero lamentan el silencio mantenido por la empresa. Esta situación de inseguridad ha dejado a los conductores sin opciones y ha forzado la suspensión del servicio, afectando a miles de usuarios que utilizan esta línea de buses diariamente.

Según informaron a Latina Noticias, los conductores de los buses ‘El Chino’ no solo verían afectados sus ingresos al detener el servicio, sino que también les ha generado temor, pues sienten que su seguridad personal está en constante peligro.

Manifestaron la ausencia de medidas de seguridad concretas tanto por parte de la empresa como de la Policía hasta el momento. Señalaron que, aunque los atentados parecen estar dirigidos específicamente contra la empresa, ellos son los más expuestos al peligro al estar al volante.

En sus declaraciones, los choferes comentaron que desconocen si los dueños de la empresa han recibido algún mensaje extorsivo. “Se está pidiendo seguridad, ya que uno sale de casa y quiere llegar bien a casa”, expresó un conductor en diálogo con el medio. La solicitud de los choferes hacia la empresa es explícita: requieren medidas de protección para continuar trabajando sin el miedo constante de sufrir un ataque.

Más de 1,500 denuncias por extorsión han sido recibidas por la Policía Nacional del Perú (PNP) en Lima durante lo que va de 2024, según informó Latina Noticias. El coronel Jorge Carpio, jefe de la División de Extorsión de la PNP, advirtió sobre el incremento de estos delitos, principalmente en distritos como San Juan de Lurigancho, que es el más afectado por esta problemática.

Carpio explicó que las modalidades de extorsión más comunes detectadas incluyen el ‘chalequeo’ y el ‘contrato para no matar’. El ‘chalequeo’ consiste en exigir a la víctima un pago a cambio de supuesta protección para ellos, sus familias o negocios. Por otro lado, la segunda modalidad implica simular que se ha sido contratado para asesinar a la víctima, ofreciéndose no llevar a cabo el acto si se paga una suma de dinero.

Este esquema delictivo ha tenido como principales víctimas a dueños de pequeños negocios y profesionales independientes, que se han visto particularmente expuestos debido a la falta de seguridad en sus zonas. Datos de la PNP revelan que la cantidad de denuncias en lo que va del año es superior a la registrada en el mismo período de 2023.