La gestión del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables se enfrenta a un descontento creciente en Madre de Dios. El reciente intento de feminicidio, que tuvo lugar el último viernes 9 de agosto, así como la posterior liberación del presunto agresor, ha generado un clima de tensión y malestar entre la población. Este evento se suma a los dos casos de feminicidios ocurridos en la misma región meses atrás, cuyos culpables aún no han sido capturados.
En medio de este contexto, la titular del MIMP, Ángela Hernández Cajo, visitó Puerto Maldonado el martes 13 de agosto para presentar la estrategia Con Punche Familias, servicio integral que promueve prácticas de crianza saludables y relaciones familiares libres de violencia. Sin embargo, su presencia no fue recibida de la forma en que ella esperaba.
Rechazan visita de la ministra de la Mujer
De acuerdo a medios locales, durante su pronunciamiento, Hernández no hizo mención de los hechos de violencia contra la mujer que han ocurrido en Madre de Dios, lo que provocó la indignación de varias ciudadanas que esperaban una respuesta y una lista de acciones concreta por parte de la autoridad.
Frente a ello, integrantes del colectivo feminista Wanamei Morado se organizaron para cuestionar la ministra por la inacción frente al caso de feminicidio ocurrido hace tres semanas en Puerto Maldonado, además de una tentativa de este delito, de hace cuatro días en la misma ciudad. “Nos matan todos los días”, lamentaron.
Sobre el intento de feminicidio, el agresor fue puesto en libertad por la Fiscalía pese a haber dejado a su pareja con severas lesiones en el cuerpo cuando ella intentaba terminar la relación. La titular del MIMP solo atinó a escuchar el pedido de cese de la violencia contra las mujeres y alegó que “van a coordinar con la Policía” la captura del agresor.
Hernández Cajo solo pidió a sus acompañantes que tomaran los datos de las personas que presentaban quejas para brindarles alguna solución y, posteriormente, se retiró en un transporte particular.
Pedido de captura inmediata del agresor
Por su parte, Patricia Garrido Rengifo, directora del Programa Nacional Aurora, enfatizó en declaraciones a Radio Madre de Dios la urgencia de capturar al agresor.
“Pedimos que se realice cuanto antes esta acción para que Waldir Ademir Coral sea detenido como corresponde y las investigaciones se lleven con él en prisión. Pedimos celeridad y justicia. Ningún caso de violencia puede quedar sin una sanción”, afirmó.
Madre de Dios ha registrado, en lo que va del año, dos feminicidios que aún no han sido resueltos. En tanto, Virginia Rojas, coordinadora territorial del programa Aurora del MIMP, informó sobre un reciente feminicidio en la localidad de Santa Rita Baja, en Inambari, donde también se reportó abuso sexual a la hija de la víctima, indicó. En junio también se lanzó la intervención ‘Prevenir para proteger’ centrada en la Amazonía, destinada a evitar la violencia sexual en adolescentes.
Los habitantes de Madre de Dios continúan esperando acciones concretas y efectivas por parte de las autoridades locales y nacionales frente a esta problemática que afecta su región y que, según las ciudadanas, no ha recibido la atención que merece.
Feminicidios en Perú
Según las más recientes estadísticas del Programa Aurora, 93 mujeres han sido víctimas de feminicidio en el último año en Perú, lo que equivale a una muerte cada dos días. Asimismo, se registraron 106 intentos adicionales de feminicidio durante el mismo período, lo que subraya la persistencia de este delito a pesar de su tipificación en el Código Penal.
La violencia de género es una problemática que no deja de alarmar en Perú. Su nivel de incidencia sigue aumentando debido a diversos factores, entre ellos, la vulnerabilidad de las mujeres, el escaso acceso a educación y recursos económicos, y una justicia que muchas veces ofrece impunidad debido a la debilidad del Poder Judicial. Esta situación se ve agravada por la limitada ayuda del Estado para enfrentar el problema, reporta el Programa Aurora del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP).
En el análisis de los casos de feminicidio, se observó que en el 67,8% de los mismos, el perpetrador tenía o había tenido una relación sentimental con la víctima. Este dato pone de relieve la gravedad de la violencia doméstica y de pareja, áreas en las que el sistema de protección a mujeres debe enfocarse más intensamente para prevenir estos crímenes.