En el distrito de La Victoria, la disputa por el control del centro comercial Parque Cánepa desencadenó una serie de enfrentamientos entre comerciantes y la constructora que administraba el lugar. La tensión, que lleva varias semanas en aumento, culminó con la intervención de las autoridades y la restitución del control a la Municipalidad de La Victoria.
El Parque Cánepa es un punto neurálgico para la economía local. Durante décadas, fue un espacio de trabajo para microempresarios y confeccionistas que encontraron en sus pasillos una fuente de sustento. Sin embargo, la administración del centro comercial se convirtió en un tema de disputa entre los arrendatarios y la empresa Constructora Listos SAC, que durante años gestionó el lugar. La situación escaló a tal punto que los comerciantes fueron desalojados y se les impidió el acceso a sus locales, generando pérdidas económicas considerables.
El conflicto alcanzó su punto crítico en la madrugada del sábado 10 de agosto, cuando se registraron enfrentamientos entre los comerciantes y la constructora. Según testigos, la situación se tornó violenta, y la Policía Nacional del Perú intervino para evitar mayores incidentes. Los comerciantes, que exigían la devolución de sus locales, se encontraron con un despliegue policial que les impidió acceder al interior del centro comercial.
La frustración de los arrendatarios era evidente, ya que llevaban más de dos semanas sin poder trabajar ni recuperar su mercadería.
Miriam Naupa, una de las representantes de los arrendatarios, describió la situación como desesperante. “Hemos estado parados en esta puerta durante semanas, intentando ingresar, pero la policía nos impedía el acceso. Tocábamos la puerta y, aunque sabíamos que había gente adentro, nos decían que no había nadie. Era indignante. Llevamos prácticamente 20 días sin trabajar, lo que nos ha generado pérdidas significativas, especialmente en una época en la que nuestras ventas suelen aumentar”, explicó.
La tensión aumentó cuando, después de varios intentos fallidos de ingresar al centro comercial, un grupo de comerciantes decidió tomar acciones más drásticas. Según los informes, algunos intentaron forzar la entrada, lo que provocó un enfrentamiento directo con el personal de seguridad contratado por la constructora. La situación escaló rápidamente, y la intervención de la Policía fue necesaria para restablecer el orden.
La intervención de la Fiscalía y la municipalidad
Tras los enfrentamientos, la Fiscalía del distrito se hizo presente en el lugar y, después de evaluar la situación, decidió otorgar la administración del Parque Cánepa a la Municipalidad de La Victoria. Este hecho fue recibido con alivio por parte de los comerciantes, quienes habían estado exigiendo la intervención de la institución desde el inicio del conflicto. Susana Saldaña, presidenta de la Asociación de Empresarios de Gamarra, expresó su satisfacción por la decisión. “Después de 30 años, al fin el control del Parque Cánepa regresa a La Victoria. Los verdaderos microempresarios y confeccionistas de Gamarra estamos muy contentos con este cambio”, declaró Saldaña.
También denunció que la mercadería de los comerciantes había sido retenida por la constructora, impidiéndoles trabajar y generando pérdidas superiores a los S/ 20 mil en las últimas dos semanas. “Nos han tenido secuestrada la mercadería desde antes del 21 de julio. Nos hostigaban para que compráramos acciones de una empresa que ni siquiera existía. Esto es inaceptable”, añadió.
Sin embargo, la situación no se ha resuelto por completo. A pesar de que la municipalidad asumió la administración del centro comercial, el lugar continúa cerrado debido a la falta de un certificado de Defensa Civil, un requisito indispensable para garantizar la seguridad de los ocupantes.
La respuesta de las autoridades y el futuro del Parque Cánepa
La Municipalidad de La Victoria emitió un comunicado en el que aclaró su posición respecto al conflicto. En el documento, se señala que la administración anterior del Parque Cánepa, a cargo de la constructora, estaba fuera de su control y que la intervención municipal se dio en estricto cumplimiento del Estado de derecho. Asimismo, se destacó que, tras la intervención del Ministerio Público y la acreditación de la municipalidad como legítima propietaria del inmueble, se tomaron las medidas necesarias para garantizar la seguridad del lugar y el orden público.
El comunicado también hizo un llamado a los comerciantes para que eviten caer en provocaciones que puedan afectar el normal funcionamiento del centro comercial una vez que reabra sus puertas. “La Municipalidad invoca a los comerciantes a mantener la calma y a colaborar para que el proceso de reapertura se dé de manera ordenada y segura”, se lee en el comunicado.