Por significar un atentado contra la salud pública, un depósito clandestino que almacenaba cientos de baldes con aceite de cocina usado fue intervenido por personal de fiscalización de la Municipalidad de La Victoria y agentes del Departamento de Investigación Criminal de la Policía Nacional del Perú (PNP).
La familia que tenía a cargo este ilícito negocio también fue abordada por los efectivos al interior del inmueble, ubicado entre los jirones Francia y Manuel Cisneros. De acuerdo a las autoridades, este aceite de cocina usado, que era vendido a 70 soles el balde, terminaba en algunas pollerías y chifas de Lima.
“Nuestro equipo de fiscalización con apoyo de la Depincri de La Victoria realizó un operativo en el Jr. Francia con Jr. Manuel Cisneros a una presunta fábrica de reciclaje de aceite, en la cual se vendería este insumo de manera clandestina”, informó la comuna victoriana en su Facebook.
Según el municipio, como parte del operativo se sancionó a los responsables por utilizar el predio como un almacén informal y invadir la vía pública como su ‘espacio de trabajo’. “Continuamos velando por la salud de nuestros vecinos”, remarcó la autoridad edil.
El personal policial identificó a Freddy Chomel Valenzuela Serna, quien tiene antecedentes policiales por delitos contra el patrimonio y estafa, como el encargado de almacenar cientos de estos baldes en su depósito clandestino de La Victoria.
Durante el operativo, los familiares quisieron poner resistencia y evitar la intervención. A uno de los integrantes del clan se le observó que portaba en la cintura un cuchillo de cocina, de al menos 30 centímetros, para amedrentar a la autoridad.
Entre empujones y gritos, finalmente fue intervenido el depósito clandestino y retirado numerosos baldes con la sustancia contaminada que terminaba siendo usada en algunas cocinas de pollerías y chifas de la capital para freír papas y otros alimentos.
“No ha tenido ningún tipo de documento que acredite la legalidad de su funcionamiento, por eso es que ha sido la intervención. Y esto significará el inicio de los operativos que vamos a tener continuamente”, dijo un vocero de la municipalidad.
Algunos inescrupulosos, dueños de establecimientos de comida, llegaban hasta ese depósito en La Victoria para comprar el aceite reciclado. Pagaban 70 soles en vez de 180 por un balde sellado y con la sustancia limpia.
Al ser abordado por el programa Ocurre Ahora, de ATV, Valenzuela Serna explicaba de dónde supuestamente provenía el aceite, sin saber que era grabado por un reportero de investigación. Según su relato, lo sacaba de un conocido supermercado.
“El aceite lo usan un ratito y lo cambian. Hay aceite hasta que está para que lo uses un mes, 15 días más. Tengo muchos más, porque también tengo mi depósito”, dijo el sujeto.
Es una ‘bomba de tiempo’
Los vecinos también hicieron notar que este depósito clandestino no solo representa un potencial daño contra la salud pública, sino también una ‘bomba de tiempo’, pues si se produce un incendio la sustancia inflamable podría avivar las llamas y exponer la vida de niños y ancianos que viven en los alrededores.
Desde el punto de vista nutricional, la reutilización de los aceites aumenta su estado de oxidación y el ranciamiento de los alimentos, generando la producción de radicales libres y en algunos casos la formación de ácidos grasos trans. Según expertos, el consumo excesivo, y por tiempo prolongado de estos, pueden ocasionar disfunciones hepáticas, cardiacas y del sistema reproductor, cáncer, envejecimiento celular, afecciones inmunes, artritis y cataratas, entre otros males.
Asimismo, se ha encontrado que las frituras realizadas con aceites oxidados pueden generar problemas a nivel del colon, pues forman moléculas de gran tamaño que impiden la absorción de sustancias nutritivas necesarias para el organismo