Interno del penal de Ayacucho aparece sin vida en una celda: reos denuncian que fue asesinado por el personal del Inpe

El hallazgo del cuerpo sin vida de Carlos Alberto Puma Choccare, interno del penal de Ayacucho, conocido como ‘Pumita’, el 3 de agosto del 2024, despertó la indignación de sus compañeros de pabellón, quienes realizaron un acto de protesta en el que acusaron a personal del establecimiento penitenciario de ser los responsables por la muerte del interno.

Según un comunicado difundido por el Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Puma Choccare fue hallado “suspendido de los barrotes del ambiente de meditación” y se comunicó inmediatamente el hecho a la Fiscalía y a la Policía Nacional del Perú para realizar las investigaciones. También se indica que la causa de la muerte, determinada por el Ministerio Público, sería un “presunto ahorcamiento”.

Sin embargo, una comunicación recibida entre uno de los internos y familiares de Puma Choccare revelaría que sería el propio personal del INPE quienes estarían detrás del fallecimiento del interno.

Según los internos del establecimiento penitenciario, uno de los funcionarios, conocido como ‘Casimiro’ sería el responsable principal del fallecimiento de ‘Pumita’ pues lo acusan de cometer abusos como “meterles la mano” y cobrarles para no agredirlos con montos cercanos a los 500 soles.

Este también fue un reclamo presente en el acto de protesta organizado por los reos, que alzaron carteles en los que se manifestaba su disconformidad por los actos contra ‘Pumita’ y las condiciones en las que viven. “Casimiro, asesino y extorsionador”, “por registrar a la visita nos cobra S/ 100″, “Queremos justicia para Puma”, entre otros, fueron los mensajes escritos por los reos en su manifestación al interior del establecimiento penitenciario.

El ingreso de Carlos Alberto Puma Choccare al penal de Ayacucho se produjo en el año 2017, cuando fue intervenido en el Vraem por miembros de la Policía Nacional del Perú (PNP), cuando conducía un auto en el que se encontraban camuflados 20 kilos de pasta básica de cocaína (PBC).

Según artículos de prensa de ese año, Carlos Alberto Puma Choccare tenía en ese entonces 21 años y fue procesado por delitos contra la salud pública.

Una de las problemáticas que enfrenta el penal de Ayacucho -y los establecimientos penitenciarios en general- es la sobrepoblación de internos en sus instalaciones. Hasta el año 2023 medios locales registraron que esta cárcel albergaba a más de 2.700 reos, pese a que su capacidad real es de 670.

Las cárceles peruanas enfrentan una crisis de sobrepoblación extraordinaria, llegando a un exceso del 130% sobre su capacidad real, según los informes más recientes del Instituto Nacional Penitenciario (INPE). Actualmente, Perú cuenta con 68 establecimientos penitenciarios en todo el territorio nacional, diseñados para albergar a 41.019 reclusos.

Sin embargo, la cifra real de población penitenciaria asciende a 93.985, lo que deja un excedente de 52.966 presos sin el espacio adecuado para ser recluidos en condiciones dignas.

Entre los 68 establecimientos penitenciarios del país, 49 reportan tasas de hacinamiento crítico, superando en muchos casos el 100% de su capacidad y, de forma aún más alarmante, algunos llegan a sobrepasar el 200%, 300%, 400% y hasta el 500%.