La titular del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), Elizabeth Galdo, reafirmó su compromiso de posicionar al Perú como el principal destino turístico en la región para el año 2030. La funcionaria señaló que la guía turística y las inversiones en el sector serán fundamentales para conseguir tal objetivo. No obstante, la optimista visión de la representante del Mincetur no parece ser compartida por los gremios de hoteles, restaurantes y afines, que recientemente cuestionaron los supuestos avances de la cartera.
“En las proyecciones que realizamos vemos cómo las inversiones en el sector turístico siguen incrementándose, tanto en hotelería como en los demás servicios. Para el año 2030, el sector atraerá a más de un millón de turistas únicamente con la nueva atracción que posicionaremos: Choquequirao”, comentó Galdo.
La funcionaria advirtió que la actividad turística no debe depender exclusivamente de generar nuevos espacios de atracción turística, sino que consiste fundamentalmente en revalorar las atracciones existentes. En ese sentido, mencionó que es necesario darle prioridad a la promoción del turismo gastronómico, pues la diversidad culinaria de la patria es muy amplia y debe generarle mayores beneficios al sector.
Guía turística nacional
Como se recuerda, el 16 de julio de este año se llevó a cabo el lanzamiento de la primera guía turística, la cual resalta los atributos y las oportunidades existentes en materias de inversión en el Perú. Según la ministra, esta publicación brinda información actualizada acerca del país, resume los impuestos corporativos y los beneficios específicos para las inversiones turísticas en el Perú, detalla el flujo de inversión extranjera y las perspectivas de crecimiento a futuro del panorama económico nacional, entre otros datos que destacan las atractivas opciones de inversión en turismo.
De igual manera, la guía contiene información que detalla la estabilidad peruana respecto a las inversiones, así como también muestra la trayectoria en el manejo macroeconómico, lo que coloca al Perú como el segundo país con la mejor calificación crediticia en la región y como uno de los países más solventes de América Latina en cuentas fiscales.
Bajo nivel de crecimiento
La falta de promoción del turismo, la escasa conectividad y la reprogramación de vuelos son algunas de las razones por las cuales el sector nacional no ha crecido al ritmo de la región. Las crisis climáticas, políticas, económicas y sociales que vivió el país el año pasado también jugaron un papel crucial en la reducción de viajes. Estas dificultades impactaron directamente en la capacidad del país para atraer turistas internacionales y fomentar el turismo interno, afectando gravemente al sector, una fuente importante de ingresos y empleo.
El turismo interno se vio severamente limitado por la situación financiera de las familias peruanas. La inestabilidad económica redujo el poder adquisitivo, llevando a muchas personas a reconsiderar sus gastos en viajes y ocio. Además, las protestas sociales y los fenómenos climatológicos provocaron el cierre temporal de aeropuertos y la obstrucción de vías nacionales. Estas interrupciones en la infraestructura de transporte no solo dificultaron el libre tránsito de turistas, sino que también afectaron la logística y el suministro de servicios esenciales en las zonas turísticas.