Radiografía de Dina Boluarte: sus discursos, gestos, acciones y tensiones con la prensa

Ha pasado un año desde que Dina Boluarte, vestida de blanco, se dirigió al Perú desde el Parlamento, luego de un polémico inicio de gobierno, con cuestionadas medidas, pero sobre todo, muertes en protestas que aún en 2024 no se aclaran ni se hace un mea culpa. Su traje blanco que lució aquel 28 de julio de 2023 no se reflejó en la ciudadanía, quien hoy rechaza las acciones de la mandataria con un 90% de desaprobación en las encuestas y no ve con buenos ojos la alianza con el Parlamento, todo para quedarse en el poder hasta el 2026.

Una mujer gobierna el Perú, un país menoscabado en la última década. Basta con señalar que entre 2016 y 2021 tuvo cuatro presidentes: Pedro Pablo Kuczynski, Martín Vizcarra, Manuel Merino y Francisco Sagasti. Este último saludó la proclamación de Pedro Castillo, sin presagiar que habría desaciertos políticos y un golpe de Estado fallido.

Aquella mujer que pronunció estas palabras de manera irascible ante los ciudadanos de Juliaca ―que todavía llevaban puestas mascarillas―, no dejó de ser autoridad luego de que Castillo Terrones fuera destituido por “permanente incapacidad moral” para gobernar. Como primera vicepresidenta, le tocó asumir las riendas del Perú el 7 de diciembre. Unos cuantos días atrás se desempeñaba como ministra de Desarrollo e Inclusión Social, un cargo que le permitía dirigirse a la población cada vez que realizaba un balance de su equipo de trabajo.

Antes de que asumiera la presidencia, la mayoría de los peruanos conocía poco sobre su vida y apenas recordaba sus discursos. Sabían, a lo sumo, que había sido ministra de Desarrollo e Inclusión Social. No obstante, un sector de la población recordaba una de sus declaraciones posteriores a los primeros resultados del conteo rápido de Ipsos, que ubicaron a Pedro Castillo en primer lugar, seguido de Keiko Fujimori.

“La clase media acomodada limeña seguramente dejará de ser clase media acomodada”, dijo Boluarte. Horas después, los internautas comenzaban a opinar en las redes sociales sobre este mensaje. Esto generó preocupación.

Desde aquella vez que declaró a la prensa, han pasado más de tres años, de los cuales un año y medio se desempeña como presidenta. En todo este tiempo, los peruanos han sido testigos de sus diversas acciones, las cuales pueden estar ancladas en la memoria de todos. Como mandataria, Dina Boluarte ha dado discursos, ha participado en actos protocolares, viajó al extranjero, atendió a la prensa peruana en pocas oportunidades, entre otras actividades.

Como en toda democracia, algunos pueden estar en desacuerdo con las acciones de la mandataria. Lo cierto es que, en el transcurso de su mandato, Boluarte ha estado en el ojo de la tormenta en más de una oportunidad por presuntos actos de corrupción y acciones que ha realizado, elementos que se suman al malestar por las muertes durante las protestas antigubernamentales. El descontento de la población no es una mera suposición; se ha materializado en encuestas que revelan su bajo porcentaje de aprobación.

¿Por qué la gran mayoría de los peruanos desaprueba la gestión de la jefa de Estado? Un encuestado podría señalar el desempleo, otro por los presuntos actos de corrupción en el gobierno o las políticas públicas que han fracasado en cumplir expectativas en áreas clave como educación y seguridad. Ahora bien, para abordar este tema, Infobae Perú conversó con analistas políticos y un experto en marketing político, quienes no solo arrojaron luz sobre el descontento generalizado, sino que también analizaron las acciones de Dina Boluarte.

En el segundo semestre de 2023, ocurrieron acontecimientos en la política que es pertinente dar a conocer para tener un panorama claro de lo que pasó y poder así construir una opinión basada en los hechos. Por ejemplo, el Gobierno emitió decretos legislativos luego de que el Congreso le otorgara facultades para legislar en diversos temas, destacando uno en particular: la seguridad ciudadana.

Dina Boluarte se reunió con líderes políticos y religiosos. Tal es el caso de su encuentro con el papa Francisco en la Ciudad del Vaticano, y la breve conversación que sostuvo con Joe Biden en el marco de la 30° Reunión de Líderes Económicos del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC). Cabe señalar que ambos políticos no tuvieron una reunión bilateral.

La segunda mitad de 2023 estuvo igualmente marcada por conflictos políticos. Uno de los más significativos involucró a la mandataria y a Patricia Benavides, quien presentó una denuncia constitucional contra la presidenta por las muertes ocurridas durante las marchas antigubernamentales.

Estos son algunos de los sucesos que ocurrieron y que captaron más la atención de la opinión pública y de los analistas políticos entre agosto y diciembre de 2023. Habiendo conocido estos hechos, es preciso dar a conocer las opiniones de los especialistas.

La falta de liderazgo se traduce en las pocas promesas que ha cumplido en el último año. Como es sabido, en el discurso de fiestas patrias anunció más de 200 acciones, las cuales giran en torno a corrupción, pobreza y salud, entre otros temas. Si bien inauguró obras y planteó propuestas junto con los miembros del Consejo de Ministros en aras de los peruanos, es preciso señalar que lo hizo, según los analistas consultados, a la sombra del Congreso.

“El Congreso ha aumentado su poder bajo el gobierno de Dina Boluarte. Sin duda, la administración de Boluarte está totalmente supeditada, e incluso sometida en ciertos casos, al Congreso. El Parlamento ha conseguido casi todo lo que ha querido, en gran parte debido a la escasa oposición política. Sin embargo, creo que esto cambiará en los próximos meses, ya que, a medida que comience la campaña electoral, mostrarse cercano al Poder Ejecutivo no tendrá mucho sentido para las candidaturas. Preveo una oposición férrea en el futuro próximo”, sostuvo Radzinsky.

En esa línea, Franz Portugal, analista político y profesor de Comunicación Política y Marketing Social de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), dijo lo siguiente: “Tenemos un gobierno débil y está sujeto a las decisiones que toma el fujimorismo en asuntos políticos y en la elección inclusive de quienes son los miembros del Ejecutivo. A la alianza entre el fujimorismo y el Poder Ejecutivo se ha articulado Alianza para el Progreso. Por eso, vemos en algunas esferas del Estado a representantes del partido de César Acuña. (...) Muchos de los proyectos de ley que maneja el fujimorismo no los presentan ni siquiera los congresistas de Fuerza Popular; quienes lo dan a conocer son los de APP”.

La supuesta alianza se sustenta en la polémica designación de 11 subprefectos militantes de APP. Es menester señalar que César Acuña, líder de Alianza para el Progreso, y Boluarte se han reunido en varias ocasiones. Estos encuentros no generarían controversia si no fuera porque, casualmente, militantes de APP han asegurado puestos de trabajo tras dichos encuentros. Por si no fuera, los congresistas de APP, en su mayoría, rara vez se oponen al gobierno.

Luis Olivera, docente de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) y especialista en marketing político, también se refirió al vínculo cercano que existiría entre el Gobierno y el Poder Legislativo. “No entiendo por qué el Gobierno pidió una tregua al Congreso si ambos se entienden. Hay una serie de leyes que debieron haber sido observadas por el Ejecutivo. Por ejemplo, con la reforma electoral. Entonces, ambos viven en cierta armonía. Criticar sin actuar el uno sobre el otro es cómodo y, tal como lo hacen, es inocuo; no tiene efectos reales en términos políticos”, argumentó.

En cuanto al asunto de la ley de reforma electoral, es preciso indicar que el Ejecutivo ratificó los cambios a la Ley de Organizaciones Políticas (28094) aprobadas por el Pleno del Congreso a mediados de diciembre de 2023. Esto implicó la modificación de la modalidad de las Elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias, conocidas como las PASO. Ahora se deja a criterio de los partidos políticos elegir el mecanismo para la selección de sus candidatos en un proceso electoral.

En 2024, el gobierno de Boluarte siguió en el ojo de la tormenta, pero esta vez todos los reflectores se centraron en ella. El motivo fue el denominado ‘caso Rolex’, que involucra a la presidenta en una investigación por presunto enriquecimiento ilícito y omisión de propiedad de relojes de lujo en su declaración. Además, se suma la actitud algo hostil que ha mantenido la presidenta con la prensa.

En el último año de su gobierno, la presidenta de la República, Dina Boluarte, ha experimentado una gestión llena de altibajos. Ha liderado esfuerzos para revitalizar la economía y mejorar la infraestructura, mientras se enfrenta a críticas por el aumento de la inseguridad ciudadana y presuntos actos de corrupción. Su administración ha impulsado programas sociales para combatir la pobreza, aunque estos han sido cuestionados por problemas de implementación y falta de atención prioritaria.

Su viaje al extranjero también fue analizado por los especialistas, quienes no dudaron en emitir juicios de valor. “En las reuniones internacionales que ha tenido con autoridades de otros países, no hay registros en video. Imagínate lo que dirá. Mi primera impresión de la entrevista que concedió a un medio de China fue que parecía una pobrecita pidiendo apoyo al gobierno chino para resolver sus problemas. Lo que hizo en esa entrevista dejó una mala impresión”, manifestó el analista político Portugal.

Jeffrey también opinó sobre la entrevista concedida a un medio de comunicación extranjero y analizó la parte en la que hizo referencia al chifa. “Creo que es una mala estrategia de comunicación política. Trata de mostrarse cercana, pero hay una premisa fundamental: generar credibilidad en lo que se dice. Cuando hay desconfianza y rechazo, intentar parecer cercana puede resultar poco sincero. En general, en la comunicación política gubernamental, se deben multiplicar los actos que proyecten una imagen coherente”, indicó.

Infobae Perú también conversó con Giancarlo Vizcarra, experto en comunicación verbal y no verbal, quien analizó varios discursos y gestos de la presidenta. Como es sabido, en la entrevista que dio a un medio chino, la mandataria se conmovió. Sobre este suceso, el profesional dijo lo siguiente: “Es probable que la emoción tuviera una carga de tristeza. Quizá el no dormir bien ―ella lo dijo en una entrevista― la está llevando a no tener un control de las emociones. Las personas que no descansan bien suelen ir de una emoción a otra de manera rápida. Así que podríamos decir que esa emoción podría tener algunos indicios de ser verdadera”, aseveró.

En el primer mes de su gestión, la jefa de Estado señaló que duerme dos horas al día, una información que sorprendió a la opinión pública. Esta declaración generó polémica entre los peruanos, quienes manifestaron que una persona se nota cuando no duerme bien y que la presidenta no luce cansada.

En otro momento de la entrevista, el especialista también analizó la relación que tiene con la prensa. Desde que asumió el cargo de presidenta de la República, la nacida en la ciudad de Chalhuanca (Apurímac) ha mantenido una relación tensa con la prensa. Durante sus primeros meses en el poder, más de un periodista ha señalado tener dificultades para obtener información directa y la falta de transparencia en algunas de sus declaraciones. Las conferencias de prensa han sido escasas y, en múltiples ocasiones, las preguntas de los medios no fueron respondidas.

El especialista explicó que el accionar poco amable de la presidenta ante la prensa podría deberse a la influencia de las neuronas espejo. En rigor, las neuronas espejo juegan un rol importante en la explicación de por qué las personas tienden a actuar negativamente cuando sus interlocutores se comportan de la misma manera. Estas neuronas se activan tanto cuando una persona realiza una acción como cuando observa a alguien más realizarla. Este mecanismo neuronal facilita la empatía y la imitación.

Vizcarra señaló que cuando un individuo percibe un comportamiento negativo en otra, las neuronas espejo reflejan esa acción en su propio cerebro, lo que puede llevar a una respuesta similar. Con esta explicación, el profesional no intentó justificar el accionar de Boluarte; sin embargo, reflexionó sobre la importancia de comunicarse de manera asertiva, tanto por parte de los periodistas como de las autoridades.

En sus últimas apariciones frente a la prensa, la otrora primera vicepresidenta de Perú Libre se ha mostrado sonriente, pero según un especialista en comunicación no verbal, esta expresión no es genuina. “Es una sonrisa fingida y forzada que no refleja su verdadera emoción. Después de recibir preguntas incisivas de la prensa, notamos una sonrisa en su rostro. Sin embargo, si observamos detenidamente el video, se puede percibir tensión muscular en los ángulos de su boca y alrededor de sus ojos. Esto no ocurrió cuando sonrió durante la entrevista con un medio de comunicación chino”, agregó.

Otro de los discursos que se analizaron fueron las veces que habló en quechua. “¿Por qué centrarse solo en lo que ella conoce, como hablar en quechua? Está utilizando su conocimiento para generar mayor empatía con una audiencia específica, y eso me parece positivo porque facilita el acercamiento de las personas quechuahablantes a la política. Sin embargo, le sugeriría a la jefa de Estado que intente dirigirse al país en la mayor cantidad de dialectos posible. De lo contrario, estamos enfocándonos únicamente en un sector de la población, con el riesgo de parecer que solo buscamos figurar o enaltecer nuestro dominio de un tipo de comunicación”, apuntó.

Finalmente, el especialista en comunicación no verbal analizó la siguiente delcaración de Boluarte: “El vehículo fue adquirido en el año 2018 con el dinero de mis ahorros, producto de mi trabajo lícito (...) Muchas gracias, muy buenas tardes, hasta luego”.

“El término de la conferencia de prensa fue muy abrupto, no dio tiempo para nada, lo cual evidencia que estaba enojada Antes de finalizar, mencionó cómo compró un vehículo y dijo: ‘Producto de mi trabajo lícito’. ¿Por qué hacer énfasis en la palabra ‘lícito’? No hubiese sido más fácil decir: ‘Fue producto de mi trabajo’. Como diría Mark McClish, gran investigador de la lingüística forense: ‘Nadie miente, todos decimos la verdad; solo hay que estar atentos, escuchando y observando’”, indicó el profesional. Cabe señalar que la mandataria expresó este mensaje durante una conferencia de prensa en la que se le preguntó por el ‘caso Rolex’ y los bienes encontrados en el predio.

Dina Boluarte, la primera mujer en asumir la presidencia de la República, ha emergido como una figura controvertida desde el comienzo de su mandato y ha tenido que navegar un escenario intrincado de fragmentación y relativa polarización. Ha sido continuamente cuestionada por sectores de la oposición que la acusan de falta de transparencia.

En política exterior, su manejo ha sido escrutinado, especialmente en lo referente a mantener relaciones diplomáticas con países clave. Su presidencia, plagada de altibajos, refleja el desafío de gobernar bajo el constante escrutinio de la ciudadanía. ¿Y el Congreso? Todavía se muestra condescendiente con ella, manteniéndose en una cómoda complacencia.