Los incendios forestales continúan causando estragos en diferentes regiones del Perú. Hace unos días, el reporte de uno de estos siniestros llegó de Cusco, el cual causó estragos —específicamente— en la comunidad de Rahuanqui, en el distrito de Huarocondo, provincia de Anta.
Hoy, a 72 horas desde que comenzó, las autoridades fueron capaces de controlar las llamas, para lo cual contaron con el apoyo de brigadistas, agentes de serenazgo y voluntarios locales. El fuego, según lo informado, alcanzó el cerro San Cristóbal.
Biodiversidad cusqueña en peligro
Según reportó la Agencia Andina, las llamas, que fueron avivadas por el viento, consumieron más de 10 hectáreas de pastizales y árboles nativos, además de que afectó a la fauna de la región. Durante los tres días, la situación se vio complicada, pero el trabajo en equipo permitió controlar el incendio, de acuerdo a un pronunciamiento de la Oficina de Gestión de Riesgo de Desastres de Huarocondo.
Durante el segundo día, el incendio ya había destruido una cantidad significativa de terreno, alertaron las autoridades locales. La participación de agentes de serenazgo y de Defensa Civil del distrito de Zurite fue crucial para contener el avance de las llamas, que llegaron a las zonas altas y asumiendo riesgos importantes.
Darwin Apaza, responsable de Defensa Civil de Huarocondo, señaló a un presunto causante del incendio, un ciudadano que mostró una actitud hostil hacia el personal municipal durante su intervención. Sin embargo, las investigaciones continúan y deberán determinar las responsabilidades.
Por otro lado, César Huanca Huisa, jefe de la Oficina de Gestión de Riesgo de Desastres de Zurite, confirmó la colaboración diaria de su personal para prevenir incendios en su jurisdicción. Añadió que, a pesar de la gravedad del incendio en Huarocondo, no se reportaron daños personales y se mantendrán vigilantes por posibles rebrotes debido a las condiciones climáticas.
El incendio ha provocado una significativa pérdida ecológica y un impacto en la biodiversidad de la zona. Las autoridades continúan evaluando los daños y recalcan la importancia de la prevención y la pronta intervención para mitigar estos desastres.
Emergencias por incendios forestales en Cusco
Entre el 16 y el 19 de julio, se han registrado incendios forestales en varias localidades de cinco regiones del Perú, lo que ha provocado la devastación de cientos de hectáreas de cobertura natural, así como la destrucción de cultivos y viviendas. Además, estos siniestros han causado pérdidas humanas y de animales, así como numerosos damnificados.
Según el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), el 19 de julio, varios distritos de Cusco emitieron alertas por incendios forestales. Las localidades de Querocollana y Checanni, en el distrito de Coporaque, provincia de Espinar, fueron las más afectadas, con un total de 350 hectáreas de su área natural consumidas, siete viviendas destruidas y al menos ocho personas damnificadas que están recibiendo ayuda de las autoridades municipales.
En la comunidad de Choquetira, situada en el distrito de Inkawasi, provincia de La Convención, y en el sector Pampaquehuar, jurisdicción de Quiquijana, provincia de Quispicanchi, el fuego consumió un total de 4 hectáreas de cobertura natural.
Uno de los incendios más significativos ocurrió en Abra Málaga, en la carretera que conecta las ciudades de Cusco y Quillabamba, donde el fuego devastó varias hectáreas y ocasionó la muerte de numerosos animales silvestres, como informó Cusco Titular.
En los sectores de Huancalle y Huatta, en el distrito de Taray, provincia de Calca, en la vía Cusco - Pisac, el incendio afectó aproximadamente 3 hectáreas de cultivos de cebada, trigo, haba y tarwi. Personal de serenazgo, Defensa Civil y la Compañía de Bomberos ha logrado controlar los incendios que se registraron en diversas zonas. También se sumaron comuneros de las áreas afectadas para colaborar en las labores de contención y mitigación.