Esta es la razón por la que los presidentes del Perú dan su mensaje a la Nación cada 28 de julio

Durante las celebraciones de Fiestas Patrias en Perú, se llevan a cabo múltiples actividades que incluyen la tradicional misa Te Deum y desfiles, entre otras festividades.

Sin embargo, uno de los momentos más esperados por la población es el mensaje presidencial del 28 de julio. En este significativo discurso, el jefe de Estado se dirige a la nación, compartiendo los logros del gobierno, los retos enfrentados y los planes futuros para el país.

El mensaje presidencial al Congreso, estipulado en el artículo 118 de la Constitución, en su inciso 7, indica: “Los mensajes anuales contienen la exposición detallada de la situación de la República y las mejoras y reformas que el presidente juzgue necesarias y convenientes para su consideración por el Congreso”.

La tradición del mensaje presidencial durante las Fiestas Patrias no se originó en 1821 con la proclamación de independencia de Don José de San Martín, sino once años después, el 28 de julio de 1832.

Antiguamente, el Congreso respondía al mensaje presidencial como un gesto de cortesía. Esta práctica cesó con la promulgación de la Ley 1100 el 4 de octubre de 1909, desde entonces, el presidente concluye su discurso sin una respuesta formal del Parlamento.

Generalmente, los mensajes presidenciales se realizan en la capital, Lima. No obstante, hubo una excepción notable durante la Guerra del Pacífico en 1881, cuando el presidente Nicolás de Piérola, entonces presidente provisorio, pronunció su discurso ante la Asamblea Nacional reunida en Ayacucho, en la sierra peruana.

Por otro lado, y según los registros del Congreso, no todos los 64 presidentes que ha tenido Perú tuvieron la oportunidad de dirigirse al Parlamento el 28 de julio. Uno de los destacados en este aspecto fue Manuel Prado y Ugarteche, quien gobernó en dos ocasiones.

En su primer mensaje a la Nación, su discurso abarcó más de 130 páginas. Sin embargo, su discurso más extenso tuvo lugar durante su segundo mandato, el 28 de julio de 1957, con un total de 212 páginas, registrado en la base de datos del Congreso.

Durante el primer siglo de la República, los discursos presidenciales solían superar las 100 páginas. En la segunda mitad de la historia republicana, estos documentos se redujeron considerablemente, a menudo a menos de 50 páginas.

En décadas recientes, los mensajes presidenciales rara vez han superado las 50 páginas. Un caso notable es el de Alan García, conocido por sus discursos extensos. Sin embargo, el mensaje presidencial más largo en tiempos recientes pertenece a Alberto Fujimori, quien en 1991 pronunció un discurso significativo.

El mensaje presidencial no solo es un acto protocolar, sino una oportunidad para el mandatario de conectar con la población, compartir su visión y renovar el compromiso con el desarrollo y bienestar del país. Los peruanos, atentos a cada palabra, esperan con ansias este momento, conscientes de la importancia de las decisiones y planes que se delinean en este tradicional discurso.