Fallas mecánicas, un chofer que se quedó dormido, y otros detalles del trágico viaje del bus en ‘la carretera de la muerte’

Lisbeth Castro es una de las sobrevivientes de la tragedia que ocurrió la madrugada del 16 de julio, en el kilómetro 205 de la Vía Los Libertadores, cuando un bus de la empresa Molina Unión S.A.C. terminó volcándose por una pendiente de aproximadamente 200 metros de altura que dejó como saldo 25 vidas perdidas, según la información de la Región Policial de Huancavelica.

Horas después de la emergencia, se logró rescatar los cuerpos y se brindó auxilio a decenas de heridos, entre los que figura Lisbeth, una joven que viajaba sola hacia la ciudad de Ayacucho. En diálogo con el medio local Ayacucho NewsFlash, contó lo ocurrido en el bus momentos antes del accidente y reveló la negligencia del conductor y la propia empresa de transportes, así como el mal estado de la vía; factores que desencadenaron la tragedia.

La joven que viajaba en el asiente 6 del segundo piso de la unidad de placa A7E-957 sostuvo también que la infraestructura del bus estaba obsoleta y que solo minutos después de haber salido del terminal en Lima, este se descompuso. El chofer tuvo que descender de la unidad en un grifo para realizar un cambio de llanta, lo que causó que los pasajeros esperaran por un lapso de una hora en el lugar.

“Yo venia así nada más (sin cinturón de seguridad), sino que en mí costado no había nadie y me agarre de la silla, pero si me quedé atrapada, una persona estaba sobre mí, había fallecido”, manifestó y añadió que el bus dio cuatro vueltas de campana.

Algunos pobladores de la zona llegaron hasta el lugar para intentar socorrer a los sobrevivientes. Algunos de los que quedaron atrapados entre los fierros de los asientos, esperaron por al menos una hora para ser auxiliados por otros ciudadanos, y otras dos horas más para ser rescatados y atendidos por el personal médico.

Según la información de un testigo, las ambulancias llegaron casi tres horas después del accidente para socorrer a los heridos, y una de estas unidades demoró un poco más porque presentó desperfectos tal como se oye y se observa en el siguiente video donde las enfermeras tuvieron que empujar el vehículo.

El mal estado de la vía Libertadores (o Ruta nacional PE-28 A) —carretera que atraviesa las regiones de Ica, Huancavelica y Ayacucho— fue otro de los factores que contribuyó a que la unidad de Molina Unión terminara precipitándose. Además, la precaria infraestructura vial dificultó el traslado de los heridos y los cuerpos de los fallecidos por parte de las ambulancias y otros vehículos menores.

Un vídeo publicado en redes sociales por el Frente de Defensa del Pueblo de Ayacucho (Fredepa) mostró cómo la superficie de la calzada presenta una lastimosa cantidad de agujeros mal parchados, además de varias zonas desgastadas por la falta de mantenimiento en la autopista. Deficiencias que hacen perder la tracción en las llantas de los vehículos en un camino de numerosas curvas cerradas.

Cabe recordar que, en mayo, un bus de la empresa Civa sufrió un accidente en la vía Libertadores, resultando en 17 muertos, incluido el congresista Edgar Alarcón, en la región de Ayacucho. Meses antes, en febrero, un vehículo interprovincial de la empresa Molina Unión se despistó en el distrito de Huaytará, Huancavelica, durante la madrugada en una curva en mal estado de la misma vía. Estos incidentes son parte de un patrón en la Ruta nacional PE-28 A, donde entre 2013 y 2016 se registraron 195 accidentes de tránsito, según informes de la época.

La Contraloría General de la República ya había advertido meses atrás sobre el estado de la vía Libertadores, señalando que, además de los huecos y baches, carece de una correcta señalización y pone en riesgo la seguridad de quienes transitan por ella.

Infobae Perú tuvo acceso a documentos oficiales que indican que entre los años 2022 y 2024 se realizaron diversos trabajos de mantenimiento. Sin embargo, los problemas relacionados al mal estado de la ruta terrestre, por donde transitan miles de personas al año, aún persisten.

El 15 de marzo del 2024, el gobernador regional de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, declaró al medio local Diario Jornada que se intervendrían las carreteras de la región y se destinaría un presupuesto de 1.000 millones de dólares (aproximadamente S/ 4.000 millones) para mejorar la transitabilidad de los tramos que conforman la Vía Los Libertadores.