PCM y Repsol se reunirán con organizaciones de pesca artesanal antes de Fiestas Patrias: aún exigen justicia tras derrame de petróleo

Los pescadores artesanales siguen en pie de lucha contra Repsol. Tras una protesta realizada el viernes 5 de julio, los afectados lograron que la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) aborde sus pedidos antes de Fiestas Patrias.

Específicamente, el Despacho del Viceministerio de Gobernanza Territorial de la PCM coordinará una reunión con la empresa responsable del derrame de petróleo ocurrido en las costas peruanas en enero de 2022 y los dirigentes de las organizaciones sociales de los distritos afectados: Ventanilla, Santa Rosa, Aucallama, Chancay y Ancón.

Otro punto importante acordado fue que el Despacho del Viceministerio de Gobernanza Territorial de la PCM gestionará una reunión con los viceministerios correspondientes de las carteras del Ambiente, Energías y Minas y de la Producción para atender la situación y buscar soluciones conjuntas.

Los pescadores afectados por el derrame de petróleo de Repsol solicitan al Gobierno de Dina Boluarte una compensación económica completa para el segundo semestre de 2023 y una participación activa en el plan de rehabilitación ambiental. Pues, los afectados indican que la empresa solo ha proporcionado compensación por los primeros seis meses de 2023.

También, según los pescadores, Repsol quebrantó la cláusula N°7 de su acuerdo extrajudicial, lo que fue mencionado en una reunión con la Secretaría de Gestión Social y Diálogo (SGSD) el 6 de noviembre de 2023.

En dicha reunión, la empresa argumentó que sus deducciones de informes de la Organización de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) les permitían retomar las actividades de pesca en las zonas impactadas.

No obstante, un informe multisectorial con número N°D 000264-2023-PCM-SSGSD, emitido el 8 de noviembre de 2023 por el Poder Ejecutivo, confirmó que la contaminación persistía, hechos que a su vez han sido constatados por los mismos pescadores artesanales mediante monitoreos constantes donde han podido observar los contaminantes cada vez que el oleaje del mar levanta los residuos.

Por otro lado, expresaron su rechazo a la declaración de la Secretaría de Gestión Social y Diálogo (SGSD), que sugería que buscaran orientación legal a través de la Dirección General de Defensa Pública y Acceso a la Justicia del Minjusdh.

No obstante, los pescadores subrayaron que esta dirección no abarca temas de derechos humanos empresariales ni de debida diligencia, como se establece en la Ley N°29360.

Asimismo, solicitaron al Gobierno que se tomen medidas inmediatas para integrar a las personas rezagadas en el padrón único de afectados, de acuerdo con los criterios establecidos, y garantizar su compensación. Pues, según los afectados, el Grupo de Trabajo creado mediante la Resolución N°17-2023-PCM/SGSD no ha cumplido con su misión de elaborar criterios para identificar a todas las personas afectadas.

Germán Melchor, presidente de la Asociación de Pescadores Artesanales del Serpentín de Pasamayo Toma y Calla, señaló a Infobae Perú: “Si no hay una respuesta positiva de la PCM, convocaremos a una nueva marcha”.

También, resaltó que las condiciones impuestas anteriormente por la empresa responsable fueron aceptadas por necesidad, ya que de lo contrario no habrían podido recibir ninguna compensación: “La PCM siempre aduce que nosotros aceptamos esas condiciones, pero de qué íbamos a vivir”.

En esa línea, indicó que muchos de los afectados son informales y necesitan ser reconocidos y empadronados por el Estado. Por ello, como solución, recomendó a las autoridades que acompañen a los pescadores a la playa para observar las condiciones en las que trabajan, con el objetivo de lograr un reconocimiento justo y formal.

Finalmente, los pescadores exigieron que se garantice su participación activa en la fiscalización del Plan de Rehabilitación presentado por Repsol, insistiendo en que se deben atender especialmente las zonas que no han sido limpiadas de manera adecuada, y solicitaron que estas acciones incluyan no solo monitoreos, sino remediaciones del fondo marino para restaurar la viabilidad de la pesca artesanal.