El 8 de julio, durante la primera mesa técnica de seguridad organizada por la gobernación del Amazonas en Leticia, Colombia, Iván Yovera, alcalde de la Isla Santa Rosa, participó en representación de Perú. La reunión, destinada a discutir la seguridad de fronteras, fue el escenario de un incómodo momento cuando un diplomático colombiano afirmó que dicho territorio no pertenecía a nuestro país. La situación, conocida públicamente el 10 de julio gracias al congresista Guido Bellido, puso de relieve las tensiones en la región y los problemas que enfrentan los residentes de la región.
El alcalde del mencionado centro poblado, Iván Yovera, respondió en una entrevista con Latina, señalando que el interés de Colombia en la isla va más allá de una simple disputa territorial. “Cuando el río desciende, ellos prácticamente se están quedando con un riachuelo. Entonces, la salida al Amazonas, con el puerto principal, la están perdiendo. Ese sería el motivo por el interés en el territorio”, explicó el burgomaestre.
Lucha por la creación del distrito
El alcalde también recordó que desde 2014 han estado luchando por la creación de su distrito. “En el tiempo del presidente Ollanta Humala, en la frontera con Chile, una comunidad llamada Santa Rosa fue convertida en distrito en menos de seis meses. Mientras que al norte del país, la Isla Santa Rosa fue aprobada por el Congreso con la ley 31414. Sin embargo, nos están paseando de un lado para otro”, añadió.
Lo más lamentable, hasta el momento, el Poder Ejecutivo peruano no se ha comunicado con el alcalde de la Isla Santa Rosa. “Nadie se ha comunicado conmigo. Ni el canciller, ni la presidenta (Dina Boluarte), ni nadie”, afirmó Yovera, lo que agrava la sensación de abandono que sienten los habitantes de la isla.
Una disputa territorial de décadas
El comentario del funcionario colombiano sobre la “ocupación irregular” por parte de Perú reavivó una disputa que lleva más de 90 años sin una respuesta clara. Un acuerdo firmado por Perú y Colombia, conocido como el ‘Tratado de límites y navegación fluvial entre Colombia y Perú’ o ‘Tratado Lozano-Salomón’, en 1922, estableció la frontera entre ambos países, pero no mencionó la Isla Santa Rosa, ya que esta no existía en ese momento.
El thalweg, la parte más profunda de un canal de agua, es clave para delimitar fronteras entre países. Sin embargo, no es un elemento inmóvil, puesto que puede moverse debido a la carga de sedimentos desplazados por el río Amazonas. Este ‘movimiento’ provocó la formación de la Isla Santa Rosa, que no fue parte de la discusión cuando se acordaron las fronteras en 1922 y que fueron ratificadas en 1928.
En 1929, una cumbre entre los presidentes de Perú, Augusto B. Leguía, y de Colombia, Miguel Abadía Méndez, determinó la distribución de las islas en el interior del río Amazonas. Según el acta de la reunión, que fue publicada por la Sociedad Geográfica de Colombia, varias islas fueron asignadas a cada país, pero no se mencionó la Isla Santa Rosa, ya que aún no existía.
El surgimiento de la Isla Santa Rosa no se produjo hasta 1965, y no hay un documento que indique explícitamente su pertenencia a Perú. Una publicación de 2011 del Instituto de Estudios Internacionales de la Pontificia Universidad Católica del Perú, en colaboración con la Fundación Konrad Adenauer Stiftung menciona que además de la Isla Santa Rosa, surgieron otras islas en la zona, según imágenes satelitales de 1998.
Estas nuevas islas, como Patrullero-vamos, Mocahua, Corea y Coreita, y Tucushira, aparecieron debido a los cambios en el cauce del río Amazonas, que altera la situación pactada en 1922 y los trabajos de asignación realizados en 1929. La Isla Santa Rosa es reconocida como un territorio distinto de la Isla Chinería, declarada como peruana desde 1929, pero forman parte de la misma zona terrestre que ha sufrido modificaciones a lo largo de los años.
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