Senamhi: esta es la razón por la que Lima ahora tarda en amanecer ‘entre 30 a 80 minutos’

Con la llegada del invierno en el Perú, la ciudadanía coincide en que tarda más que el día se aclare en Lima Metropolitana. El reloj marca más de las seis de la mañana y todo sigue oscuro. La cobertura nubosa y las lloviznas tampoco ayudan, pero la mayoría entiende que es parte de la actual estación del año.

Esa premisa, sin embargo, da paso a que la población también se pregunte: “¿Es cierto que ahora Lima está amaneciendo más tarde?”. Según los expertos del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi), esto no es solo una impresión de las personas, sino que es un hecho real.

Bremilda Sutizal, especialista en meteorología de la institución, afirmó que la capital peruana amanece con un retraso variable de “entre los 30 a 80 minutos, dependiendo de la zona en la que uno se encuentre”.

Agregó que que ese mismo fenómeno, pero en dirección inversa, se da durante el solsticio de verano, cuando se genera el día más largo y la noche más corta del año.

En Lima Metropolitana, el fenómeno del amanecer tardío se percibe de manera más acentuada durante el invierno, debido a la presencia de una mayor nubosidad y neblina que bloquean la entrada de la luz solar. Estas condiciones climáticas generan la sensación de que el amanecer se retrasa, mencionó Sutizal.

El invierno limeño se caracteriza por cielos grises y una densa capa de nubes que se forman a bajas altitudes sobre la ciudad. Estas nubes actúan como una barrera natural que impide el paso de la luz solar, retrasando la claridad del día.

Además, la alta humedad relativa en el ambiente contribuye a la formación de neblina y niebla, lo que intensifica la oscuridad durante las primeras horas de la mañana.

Otro factor que influye en este fenómeno es la ubicación geográfica de Lima. Al estar situada en la costa central del Perú y cerca del océano Pacífico, la ciudad está sujeta a las corrientes frías de Humboldt. Estas corrientes marinas enfrían el aire, favoreciendo la condensación de humedad y la formación de neblina costera, especialmente frecuente durante el invierno.

Estas condiciones meteorológicas generan una percepción de amanecer tardío en la capital peruana, un fenómeno acentuado por factores tanto climáticos como geográficos.

De acuerdo a la experta del Senamhi, los antecedentes de este fenómeno tienen su fondo en el solsticio de invierno, que arrancó el pasado 20 de junio en la parte sur del planeta. Ese fecha ocurrió el día más corto y la noche más larga del año, un fenómeno que es considerado un paso entre el otoño y el invierno.

Esto ocurre debido a los efectos de la rotación de la Tierra, principalmente el movimiento de traslación alrededor del Sol. En el movimiento de traslación, la Tierra, a la vez que da vueltas sobre su eje, se mueve alrededor del sol. Tarda 365 días en dar una vuelta entera.

Esto genera variaciones en cuanto a la incidencia de los rayos solares sobre el planeta.

Durante el solsticio de invierno, estos rayos llegan con menor potencia a ciertas zonas de la Tierra debido a la mayor distancia que se tiene del Sol. En este momento, América del Sur, donde se ubica el Perú, experimenta los efectos del solsticio de invierno.