Muerte en Ejército del Perú: soldado es aplastado por tanques de guerra en el cuartel Fuerte Arica

La mañana del martes 9 de julio se informó que el técnico de tercera EP Basilio Quispe Ancco, de 53 años, perdió la vida al ser aplastado por un tanque de guerra en el interior del cuartel Fuerte Arica, ubicado en el distrito Locumba, provincia Jorge Basadre., en la región Tacna. El trágico accidente ocurrió alrededor de las 8:50 de la mañana mientras se realizaban trabajos de mantenimiento a los vehículos blindados.

Las diligencias en el recinto militar para investigar el hecho se extendieron hasta pasadas las 14 horas, con la participación de la fiscal provincial Elizabeth Quispe Torres, el médico legista Edgar Poma Condori, peritos de la Oficina de Criminalística (Oficri) de la Región Policial Tacna y policías de la Comisaría Ite.

Los restos del militar fueron trasladados a la morgue pasadas las seis de la tarde, luego de ser llevado a la Sanidad Policial para la extracción de sangre y el examen de dosaje etílico.

Según información preliminar, que fue recopialda por el diario Correo de Tacna, Quispe supervisaba el remolque de un tanque de matrícula EP-624 que era conducido por Edgar Belisario, hacia otro tanque de placa EP-561 a cargo de Abel Condori Serrano. Durante la maniobra, en la que se utilizaba un cable metálico para el arrastre, el militar quedó atrapado entre los dos vehículos blindados y fue aplastado, falleciendo instantáneamente.

Los peritos de criminalística señalaron que se habría producido un atropello por compresión seguido de aplastamiento por el tanque, dado que el occiso presentaba múltiples fracturas en la cabeza y exposición de masa encefálica, ocasionadas por los rodillos de uno de los blindados.

El comando de la Sexta Brigada Blindada emitió el comunicado N° 001 en el que informaron que el deceso de Basilio Quispe Ancco se produjo durante los trabajos de mantenimiento rutinario de los vehículos blindados. Indicaron que Inspectoría de la Sexta Brigada Blindada está llevando a cabo las investigaciones para determinar las responsabilidades del caso.

Asimismo, dieron a conocer que ya se encuentran trabajando junto a la Policía Nacional del Perú (PNP) y el Ministerio Público en busca de brindarles las facilidades necesarias para que realicen las diligencias de ley.

“Así mismo, reafirma su compromiso de proporcionar todo el apoyo y asesoramiento administrativo que se requiere en situaciones críticas como esta”, finaliza la misiva emitida por lo ocurrido en el Fuerte Arica.

En tanto, el Ministerio de Defensa (Mindef) también expresó su condolencias a sus seres queridos a través de sus redes sociales. “Lamentamos el sensible fallecimiento del Tco 3ro EP Basilio Quispe Ancco. Expresamos nuestras más sinceras condolencias a sus familiares y compañeros”, publicaron.

La lamentable muerte de Quispe Ancco recordó lo ocurrido el pasado mes de abril en Tumbes, en donde, durante un entrenamiento de rutina, un par de miembros del Ejército del Perú resultaron heridos.

Según reportó Exitosa Noticias en aquella ocasión, una granada de guerra explotó al promediar las 10 de la mañana y dejó heridos a los presentes en la Pampa de Los Chivatos, que es una zona de maniobras militares. Dos de ellos terminaron con los miembros mutilados: uno habría perdido la pierna, mientras que su compañero, la mano.

Ellos fueron identificados como el técnico de Segunda EP Henry Aníbal Pacheco Tejeda y el técnico de Tercera EP Gerardo Luis Sauñe Carbonell. Ambos presentaron heridas de gravedad en sus extremidades y otras partes del cuerpo.

En busca de explicar las circunstancias de lo ocurrido, el Ejército del Perú explicó que la ONG (MINES ADVISORY GROUP) y un equipo técnico militar se encontraban destruyendo los remanentes de la munición del polvorín cuando se dio la explosión.

“El Comando del Ejército ha dispuesto que el sistema de inspectoría inicie las investigaciones del caso, con la finalidad de determinar las circunstancias que ocasionaron dicho accidente, así como las responsabilidades que correspondan”, continúa el comunicado.

El Ejército del Perú finalizó su misiva aseverando que continuará trabajando con entereza en su misión constitucional de velar por la integridad y el bienestar de su personal y de todos los peruanos, “reafirmando su compromiso de respeto irrestricto a las leyes y normas emitidas en nuestra Carta Magna”.