Estudio revela que al menos el 70 % de agentes PNP presenta obesidad o sobrepeso

Mientras la inseguridad ciudadana en el Perú parece ir en ascenso, un grupo no menor de agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP) se enfrenta a ella con una seria desventaja que podría poner en riesgo su propia salud: más del 70 % de ellos padece de sobrepeso o de algún tipo de obesidad, según un estudio realizado a 174 unidades policiales, lo que representa un total de 6,388 policías.

Sin embargo, pese a que han pasado más de dos años de los hechos vinculados a la pandemia de la Covid-19, esta sigue siendo la explicación que brindan representantes de la Policía Nacional del Perú para explicar el pobre estado físico de los agentes.

El general también indicó que, si bien los agentes de la PNP pueden tener una mala forma física, “también es preocupación personal. Tampoco le echemos la culpa al rancho o a la Policía. Cada uno tiene que prepararse y eso lo estamos viendo para los exámenes”, afirmó.

Un análisis de los datos de tamizajes relacionados con el sobrepeso y la obesidad en las unidades policiales indica que, durante todo el año 2023, el 74.4 % de los más de 6 mil efectivos evaluados presentan exceso de peso en diferentes formas.

Información de Punto Final indica que la más común es el sobrepeso, con el 45.3 % de los agentes; mientras que la obesidad de tipo I se presenta en el 29.1 % de los casos; la obesidad de tipo II solo aparece en el 4.2 % de agentes; y la obesidad de tipo III solo se muestra en el 0.9 % de los efectivos que fueron evaluados.

Por otro lado, durante los primeros tres meses del año 2024 ya se realizó el mismo tipo de evaluaciones a 1.484 efectivos en 41 unidades policiales y se detectó que el 66.6 % de los agentes de la PNP tienen algún tipo de exceso en su peso.

Como es de esperarse, una influencia clave para la mejora del estado físico de los agentes de la PNP es la actividad de los nutricionistas, que por mandato deben ser los encargados de aprobar los menús que se sirven en los comedores de la Policía Nacional, de modo que se asegure la correcta alimentación de los agentes.

Según lo indicado por el general PNP Carlos Llerena, jefe de la Dirección Nacional de Operaciones Especiales (Dinoes), “una vez que se elabora el menú, se lo llevan al nutricionista. Viene una vez a la semana o cada dos semanas, verifica el menú y viene de manera inopinada para verificar que estamos cumpliendo lo que nos indica”.

El general Llerena también afirmó que el mantenimiento de un buen estado físico depende mucho de los agentes, además de las labores que realiza al interior de la institución policial. “Nuestros compañeros tienen que tomar conciencia de que deben conservar su estado físico (...)”

“Un policía que trabaja en un sistema administrativo no podría comer como comemos nosotros aquí (en Dinoes) porque su trabajo es más sedentario, está dentro de una oficina y sus labores no son tan activas como las de nosotros. Intermedio, un policía de comisaría porque está sentado en un patrullero, camina. Y la extrema, que es la de nosotros, es por la actividad diaria que tenemos”, indicó.

El problema intentó ser resuelto desde el año 2017, cuando un conjunto de nutricionistas se unió para emitir una directiva que establezca normas y procedimientos para controlar el sobrepeso en el personal policial. Sin embargo, siete años después, esta propuesta aún no es implementada.

Al respecto, el general Moisés Rojas Arcos, director del Hospital de la PNP, indicó que “esa documentación va a regir a nivel nacional, se desarrolla en el hospital y se eleva para su aprobación”. Pero al ser consultado sobre por qué esta fue devuelta con observaciones, el representante de la PNP indicó que la directiva fue elevada nuevamente para su aprobación aproximadamente en el año 2017.