“Tía María no tiene licencia social”: Alcaldes de Islay y juntas agrícolas de Arequipa exigen al gobierno detener operaciones

Población del Valle del Tambo rechaza el proyecto minero de la compañia Southern. Aseguran que no ha demostrado ser beneficioso para la principal actividad económica, la agricultura

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Manifestaciones en Arequipa exigen detener operaciones del proyecto Tía María. (Foto: Diario El Pueblo)
Manifestaciones en Arequipa exigen detener operaciones del proyecto Tía María. (Foto: Diario El Pueblo)

La población del Valle de Tambo, en la región de Arequipa, se movilizó este viernes 5 de julio en respuesta al anuncio de la reactivación del proyecto minero Tía María de la empresa Southern Perú Copper Corporation. Autoridades locales y dirigentes agrarios bloquearon la carretera Costanera para exigir al gobierno detener el inicio de las operaciones extractivas. En paralelo, se reportan manifestaciones similares en Matarani.

Los alcaldes de la provincia de Islay junto a los presidentes de las juntas agrarias y urbanas emitieron un pronunciamiento exigiendo al Ministerio de Energía y Minas que tome medidas para detener el inicio de operaciones del proyecto minero. Además, resaltaron que Tía María no ha resuelto los conflictos sociales con la población local. Acusan a la empresa de mantener una actitud provocadora.

El comunicado dirigido a diversas autoridades nacionales y regionales, incluyendo a la presidenta de la República y al presidente del Congreso, subraya que cualquier actividad industrial, como la minería, no debe lesionar la salud, la seguridad pública o la moral de las comunidades.

Tía María: Un proyecto minero envuelto en polémica en Perú. (El Buho / CAMIPER)
Tía María: Un proyecto minero envuelto en polémica en Perú. (El Buho / CAMIPER)

Puesto que el Estado peruano es responsable de garantizar la plena vigencia de los derechos humanos y promover el bienestar general, en un marco de justicia y desarrollo integral, enfatizan que la Constitución del Perú defiende la dignidad humana como fin supremo de la sociedad y del Estado, y promueve el desarrollo agrario y la conservación de los recursos naturales.

“Proyecto no ha demostrado garantías ambientales suficientes”

Entre los puntos destacados del pronunciamiento se encuentra la denuncia de que el proyecto minero Tía María no ha obtenido la llamada “licencia social” por parte de la población de Islay, una condición considerada indispensable para cualquier operación. Las autoridades locales reiteraron su rechazo a la reactivación del proyecto minero y señalaron que la minería no ha demostrado ser sostenible ni beneficiosa para la agricultura, principal fuente de desarrollo en la región.

El documento destaca la importancia de áreas de biodiversidad como el Área Natural Protegida (ANP) Santuario Nacional Lagunas de Mejía y las Lomas de Cachendo, incluidas en la lista de Ecosistemas Frágiles mediante R.M. N° 153-2018-MINAGRI-SERFOR.

Empresa mexicana Southern Cooper
Empresa mexicana Southern Cooper

Finalmente, las autoridades locales responsabilizan al Estado y a la empresa Southern Perú Copper Corporation de cualquier conflicto que pueda surgir de esta situación, citando movilizaciones anteriores que resultaron en enfrentamientos violentos y derramamiento de sangre.

“Agro sí, mina no”

Integrantes de la comunidad del Valle de Tambo se congregaron este viernes en la plaza San Francisco y en el área conocida como La Curva, en Islay, para manifestarse en contra del reinicio del proyecto minero Tía María, gestionado por Southern Copper Corporation. La protesta se focaliza en la oposición a la reactivación de actividades mineras en la región.

Durante la concentración, los pobladores portaban banderas verdes con el lema “Agro sí, mina no”, un mensaje que refleja la postura de los agricultores locales respecto a la minería en su área. Para expresar su rechazo, un grupo decidió bloquear un tramo de la carretera La Costanera, afectando principalmente el tránsito de vehículos de carga pesada.

A pesar de la presencia policial, la manifestación se desarrolló de manera pacífica. La convocatoria a la marcha fue realizada días antes, en respuesta a las declaraciones del presidente de la compañía minera, Óscar Gonzales Rocha, quien minimizó la oposición al proyecto asegurando que solo unas pocas personas estaban en contra.

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