El lago navegable más alto del mundo se encuentra en Perú: supera los 3 mil msnm y fue cuna de antiguas civilizaciones

Enclavado en lo alto de los Andes, a más de 3 mil 800 metros sobre el nivel del mar, se encuentra un vasto espejo de agua que ha escondido secretos milenarios durante generaciones. Este lago, cuyas profundas aguas reflejan la majestuosidad de las montañas que lo rodean, es ampliamente reconocido como el lago navegable más alto del mundo. Sus orillas y sus islas han sido testigos de la vida de civilizaciones antiguas que forjaron su existencia en armonía con este entorno imponente.

El Lago Titicaca, situado en el altiplano peruano, no solo deslumbra por su belleza natural, sino también por su importancia histórica y cultural. Habitado por pueblos como los incas y los tiwanakus, quienes veneraban sus aguas como fuente de vida y espiritualidad, el Titicaca es un verdadero tesoro arqueológico.

En sus profundidades y en sus riberas se han hallado vestigios de civilizaciones avanzadas, cuyas leyendas y misterios que cautivan a exploradores y estudiosos de todo el mundo.

El lago navegable más alto del mundo se encuentra en la región altiplánica de los Andes, específicamente en el altiplano peruano. Este imponente lago, conocido como el Lago Titicaca, está situado a una altitud de aproximadamente 3,812 metros sobre el nivel del mar.

El Titicaca se extiende a través de la frontera entre Perú y Bolivia, abarca una superficie de alrededor de 8 mil 372 kilómetros cuadrados. Con sus aguas cristalinas y su impresionante entorno montañoso, el Titicaca no solo destaca por su altitud, sino también por su relevancia histórica y cultural, al haber sido el epicentro de diversas civilizaciones antiguas.

Las orillas e islas del Lago Titicaca fueron el hogar de importantes civilizaciones antiguas que dejaron un legado duradero en la región. Entre las más destacadas se encuentran los Tiahuanaco y los incas.

• Civilización Tiwanaku: También conocidos como Tiahuanaco, florecieron entre los años 300 y 1000 d.C. en el altiplano andino. Esta civilización es reconocida por su impresionante arquitectura y arte, además de su compleja organización social y económica. La ciudad de Tiwanaku, situada cerca de las orillas del Lago Titicaca, fue el centro neurálgico de esta cultura. Caracterizada por monumentos megalíticos, como la Puerta del Sol y el Templo de Kalasasaya, la ciudad refleja un avanzado conocimiento en ingeniería y astronomía. Los tiwanakus se destacan también por sus habilidades en la agricultura, donde emplean técnicas de cultivo como los “sukakollos” o campos elevados, que les permitían mantener la producción agrícola pese a las difíciles condiciones del altiplano.

• Imperio Inca: Siglos después, la región del Titicaca fue integrada al vasto Imperio Inca. Los incas, que consolidaron su imperio entre los siglos XV y XVI, consideraban al Lago Titicaca como un lugar sagrado. Según su mitología, de sus aguas emergieron Manco Cápac y Mama Ocllo, los primigenios fundadores de la civilización inca, enviados por el dios sol Inti para civilizar a los pueblos andinos. Este mito reforzó la importancia espiritual del lago y lo convirtió en un centro de peregrinación y culto. Los incas desarrollaron avanzadas técnicas agrícolas, de ingeniería y urbanismo, crean terrazas y sistemas de riego que aún hoy son utilizados. La influencia inca es palpable en las estructuras y restos arqueológicos dispersos por la región, así como en las tradiciones y costumbres que aún perduran entre los pobladores locales.

El origen del Lago Titicaca se remonta a varios millones de años atrás, siendo producto de una serie de eventos geológicos que moldearon el altiplano andino. El lago se formó durante la época del Pleistoceno, hace aproximadamente tres millones de años, cuando la actividad tectónica y la elevación de la cordillera de los Andes dieron lugar a la creación de varias cuencas cerradas donde se acumularon grandes cantidades de agua.

A lo largo del tiempo, estas cuencas pasaron por diversos procesos de sedimentación y fluctuaciones en los niveles de agua debido a cambios climáticos y glaciaciones. El Lago Titicaca, en su estado actual, es el remanente más grande de una vasta red de lagos prehistóricos que una vez cubrieron el altiplano andino.

Estas explicaciones científicas se complementan con las leyendas y mitologías de las civilizaciones antiguas que habitaron la región. Según la mitología inca, el Lago Titicaca es considerado el lugar sagrado del nacimiento del primer emperador inca, Manco Cápac, y su esposa, Mama Ocllo, quienes emergieron de sus aguas por mandato del dios sol Inti.

En el último año, el Lago Titicaca ha enfrentado una preocupante disminución en su nivel de agua. Según Sixto Flores Sancho, jefe regional del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) en Puno, esta situación se debe principalmente a la falta de lluvias en la región. La escasa precipitación ha sido un factor crítico, ya que el lago se alimenta principalmente del agua de lluvia y de los ríos que desembocan en él.

Además, la situación se agrava por la intensa radiación solar y las altas temperaturas que se han registrado en la zona. Estos factores contribuyen significativamente a la evaporación del agua, reduciendo aún más el nivel del lago.