Mariano Isacama, líder indígena del Pueblo Kakataibo, ha desaparecido en medio de crecientes tensiones por la erradicación de cultivos ilegales de coca en Aguaytía, Ucayali. Así lo confirmó la Guardia Indígena Kakataibo que decidió iniciar un operativo de búsqueda por cuenta propia para encontrar al dirigente.
Pues, aunque la Fiscalía de Derechos Humanos y la Policía Nacional del Perú ha sido informada con evidencia de que Isacama podría estar secuestrado por amenazas que recibió, aún no hay evidencia de un operativo de búsqueda ejecutado por las autoridades del Estado.
Ante esta situación, la Guardia Indígena Kakataibo declaró el estado de emergencia en sus territorios y, en alianza con las guardias de los pueblos Shipibo y Asháninka, tomarán control del acceso a sus comunidades. Además, han asumido el control territorial de las Reservas Indígenas Kakataibo Sur y Norte.
“No tenemos evidencias de que esté ejecutando un operativo de búsqueda ni de una investigación realmente diligente de las circunstancias”, declararon en su comunicado.
Pueblo kakataibo cansado de la ineficacia policial
Desde mayo, la Guardia Indígena Kakataibo registra invasiones en sus territorios, lo que los llevó a establecer acciones drásticas como la quema de cultivos de coca y la destrucción de pozas de maceración, junto con la Dirección Antidrogas (Dirandro) de la PNP.
Estas medidas habrían provocado represalias por parte de grupos ligados a la producción de coca, amenazando la integridad de sus líderes. Por ello, creen que la desaparición de Isacama podría estar directamente relacionada con estos actos de interdicción.
Bajo ese contexto, además, indican que han manifestado su preocupación de manera reitera a las autoridades, solicitando un plan integral de seguridad para proteger sus tierras.
Sin embargo, sus pedidos han sido atendidos solo con operativos policiales o militares esporádicos, insuficientes y sin considerar las medidas necesarias de protección ni las posibles represalias de los grupos ilegales que ya causaron el asesinato de dos de sus líderes: Arbildo Melendez y Benjamín Flores.
“Nuestras organizaciones llevamos años advirtiendo de que se necesita un plan de intervención para la seguridad integral de nuestros territorios, pero seguimos viendo operativos policiales o militares aislados, que no contemplan medidas de protección colectiva, tomando en cuenta las previsibles represalias que llegan luego de atacar centros de producción de cocaina”, indican.
Comunidades demandan recursos para asegurar su defensa
En el mismo marco, las guardia indígena insisten en la necesidad de una pronta intervención del Estado no solo para localizar a Mariano Isacama Felciano, sino también para implementar un plan de protección que incluya patrullajes constantes y la vigilancia efectiva de sus territorios.
También, exigen que las autoridades competentes actúen con mayor rigor para desmantelar las redes de narcotráfico y otros grupos ilegales que ponen en peligro la vida y los derechos de sus comunidades.
En tanto, en medio del abandono estatal, permanecerán alertas y unidos en su demanda de justicia y protección, mientras esperan la pronta vuelta de su líder.
“El gobierno peruano tiene que tomarse en serio su apoyo a los ciudadanos que estamos conteniendo el avance de la criminalidad en la Amazonía. Para ello es fundamental la implementación efectiva de una estrategia de protección y seguridad territorial para el pueblo Kakataibo, de parte de las instituciones y autoridades correspondientes”, concluyeron.