El sismo de magnitud 7.0 con epicentro en la provincia de Caravelí, en la Ciudad Blanca de Arequipa, ha sido el más intenso de los más de 400 movimientos telúricos registrados a lo largo de este año por el Centro Sismológico Nacional del Instituto Geofísico del Perú (IGP).
El Perú, ubicado en el Cinturón de fuego del Pacífico, ha experimentado una alta actividad sísmica, según la entidad estatal. Por si fuera poco, se sabe que esta región geológica concentra el 85 % de los eventos sísmicos a nivel mundial, según cuenta la agencia Andina.
Regiones con mayor cantidad de sismos
En lo que va del año, el IGP ha informado sobre la ocurrencia de 420 sismos, siendo febrero el mes con la mayor cantidad de incidentes, contabilizando 77. Otros meses con alta actividad incluyen junio (74), mayo (73), marzo (69), abril (68) y enero (59).
La región de Arequipa lidera en número de temblores, con más de 80 sismos reportados. Le siguen Lima, Ucayali, Ayacucho, Tacna y Pasco. También se han registrado eventos sísmicos en Junín, Moquegua, Amazonas, Áncash, Ica, Puno, Tumbes, Huánuco, Huancavelica, San Martín, La Libertad, Loreto, Lambayeque y Cajamarca.
El sismo más fuerte en lo que va del 2024
El sismo más fuerte registrado en lo que va del 2024 fue el ocurrido en la madrugada de este viernes 28 de junio a la región de Arequipa, específicamente en la provincia de Caravelí (de magnitud 7.0). El epicentro del terremoto se localizó en el océano Pacífico, a 54 kilómetros al suroeste de la localidad de Yauca, y tuvo una profundidad de 42 kilómetros e intensidad de VI.
Según el IGP, este sismo es consecuencia de la interacción entre las placas de Nasca y Sudamericana, una actividad tectónica común en la región que libera grandes cantidades de energía, manifestándose en movimientos telúricos de gran magnitud. Caravelí es conocida por concentrar una alta frecuencia de estos fenómenos en el país.
Otros sismos significativos también han sido registrados en el transcurso de 2024. El 20 de enero, un temblor de magnitud 6.5 y profundidad de 611 kilómetros ocurrió en la provincia de Purús, Ucayali. Este sismo tuvo su epicentro a 294 kilómetros al norte del distrito de Esperanza y alcanzó una intensidad de III, sin causar daños según las autoridades locales.
Ocho días después, la región se vio afectada nuevamente por otro sismo de magnitud 6.2, con una profundidad de 684 kilómetros y epicentro en el estado brasileño de Acre, a 188 kilómetros al norte de Esperanza. Este evento también fue sentido en Ucayali con intensidad de III, sin reportes de daños.
Por otro lado, Camaná, en Arequipa, fue escenario de un sismo de magnitud 5.7 el 12 de enero. El epicentro se ubicó en el océano Pacífico, a 49 kilómetros al sur de Camaná, con una profundidad de 60 kilómetros y una intensidad de IV-V. La población local sintió el movimiento con fuerza, aunque no se reportaron daños materiales ni personales, según reportes de defensa civil. La Dirección de Hidrografía y Navegación de la Marina de Guerra del Perú descartó la posibilidad de un tsunami.
El 15 de febrero, un temblor de magnitud 5.4 sacudió la provincia limenña de Huaral. A pesar de que el epicentro se situó en el océano Pacífico, a 36 kilómetros al oeste de dicha localidad, el temblor tuvo una profundidad de 57 kilómetros y una intensidad de IV-V.
El más devastador
El sismo más devastador en la historia reciente del Perú ocurrió el 31 de mayo de 1970. Con una magnitud de 7.9 y un epicentro en la costa del departamento de Áncash, el terremoto y el posterior aluvión resultaron en la muerte de aproximadamente 70,000 personas y la desaparición de la ciudad de Yungay.