El próximo 1 de julio, la lideresa de Fuerza Popular y principal investigada en el caso Cócteles, Keiko Fujimori, deberá comparecer ante los jueces del Tercer Juzgado Penal Colegiado Nacional para responder por los presuntos delitos de organización criminal, lavado de activos y obstrucción a la justicia. El proceso promete ser uno de los juicios más resonados en la historia reciente del Perú, debido al tiempo que ha tomado cada una de las etapas y a los precedentes que este sienta respecto al futuro de la principal implicada en la política peruana.
Según lo detallado por el periodista especializado en temas judiciales, César Romero, la primera de las audiencias inicial está prevista para realizarse las 9:00 a.m. del 1 de julio en la sala número 1 de la sede “Carlos Zavala Loayza”, ubicada al costado del Palacio de Justicia. Y contará con un tribunal de jueces que cambió repentinamente hace unos meses, cuando como presidenta de la sala se dispuso el nombramiento de Mercedes Caballero García, en reemplazo de quien estuvo dirigiendo el proceso desde sus inicios, Nayko Coronado Salazar.
Estos tres magistrados, integrantes del Tercer Juzgado Penal Colegiado Nacional, no solo dispusieron el inicio del juicio para únicamente el primero de julio; sino que también agendaron una maratónica jornada que abarcará también el martes 2 de julio y en el que ha dispuesto la presencia de otros 38 acusados, además de Fujimori Higuchi.
Los detalles sobre el caso contra Keiko Fujimori que tomó 10 años de investigación
Existen en su totalidad un aproximado de 48 implicados en el caso, además de los acusados; y entre estos últimos, se han determinado dos personas jurídicas, el mismo partido de Fuerza Popular, al que la Fiscalía les ha atribuido la condición de organización criminal; y MVV Bienes Raíces, empresa inmobiliaria de su exesposo, Mark Vito Villanela. Existen también otros siete acusados especiales recibirán un trato jurídico diferenciado debido a su colaboración con las investigaciones de la Fiscalía, la misma que se ha venido efectuando desde hace 10 años, cuando se dio inicio a este caso.
Según lo detallado por el periodista especializado, la etapa de juicio contra la investigada política, podría durar hasta dos años, en un periodo en el que cabe la posibilidad de que la sentencia sea dictada en medio de las próximas elecciones del 2026.
Las imputaciones principales que pesan contra Keiko Fujimori son la comisión de presuntos delitos de organización criminal, lavado de activos y obstrucción a la justicia; y según lo detallado por el Ministerio Público, el partido político Fuerza Popular habría lavado al menos unos 17.3 millones de dólares. Pero, ¿en qué consistía exactamente este caso que se puso en marcha en el 2014?
Las principales acusaciones del ‘Caso Cócteles’
El “Caso Cócteles” se originó en 2014, cuando se descubrieron falsos aportantes y participantes fantasmas en las actividades de campaña del fujimorismo para las elecciones de 2011. Las acusaciones se endurecieron con la aparición de un correo electrónico en el que Marcelo Odebrecht promovía una reunión con Keiko Fujimori, ofreciéndole un aporte adicional de 500 mil dólares.
Es por esta relación con los aportes ilícitos con la cuestionada constructora que el caso pasó a ser parte de las investigaciones abarcadas por el Equipo Especial Lava Jato, coordinado por Rafael Vela y que tenía como investigador principal a José Domingo Pérez. Y con el transcurso de las investigaciones, se pudo conocer que el representante de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, declaró que la constructora brasileña aportó 1,2 millones de dólares a la campaña de Fuerza Popular en 2011.
Adicionalmente, se pudo conocer que el presidente de Credicorp, Dionisio Romero Paoletti, reveló que su entidad entregó 3,650,000 dólares a dicha campaña. Y a su vez, el fallecido empresario Juan Rassmuss Echecopar aportó a Keiko Fujimori y a Fuerza Popular otros 7,6 millones de dólares;según lo advertido por el Ministerio Público. Así, el fiscal José Domingo Pérez sostiene, basándose en testimonios y colaboradores eficaces, que Keiko Fujimori recibió 17,3 millones de dólares de fondos ilícitos, los cuales fueron blanqueados mediante las actividades partidarias de Fuerza Popular.
En las primeras fases del juicio, la fiscalía presentará hasta 5,900 pruebas, que incluyen testimonios, documentos, correos electrónicos y audios, para sustentar sus acusaciones. Entre los testigos sobresalen colaboradores eficaces que han facilitado información crucial.
Cabe destacar que, si Keiko Fujimori vuelve a postularse como candidata presidencial, deberá alternar su participación en las audiencias con sus actividades de campaña, algo que podría complicar su defensa. En vista de esta situación, la Fiscalía podría solicitar medidas cautelares más estrictas, incluida la prisión preventiva.