Increíble. Cinco valientes pescadores peruanos sobrevivieron una odisea de 68 días a la deriva en altamar, un angustiante episodio que comenzó el 4 de abril cuando zarparon desde el puerto de Ilo, capital de Moquegua.
La modesta embarcación, Atencio IV, propiedad de Cipriano Atencio, fue declarada como desaparecida el 27 de mayo. Sin embargo, los familiares de Guillermo Ramos Jiménez, Jhon Alexander Sánchez Rivas, Rolando Eduardo Ccanto Rivas, Wilfredo Cotrado Arocutipa y del ciudadano venezolano Alberto de Jesús Hernández Silva recobraron la esperanza cuando fueron encontrados en las costas de Camaná, Arequipa, por pescadores de Chiclayo.
Sometidos a las fuertes olas del mar y el viento
A su encuentro, los pescadores exhibían signos de deshidratación y un rastro de fatiga que narraba su larga travesía. De acuerdo al diario arequipeño El Búho, los sobrevivientes relataron que una avería mecánica en el Atencio IV los dejó a la deriva, siendo vistos por última vez a 134 millas de las costas chilenas, en La Serena.
“Hacíamos señas en el mar chileno, pero nadie nos ayudaba”, declaró Jhon Alexander Sánchez Rivas. Pero la ayuda llegó desde Pucusana, en un barco identificado como Ronald I, que finalmente les tendió una mano.
“Hicimos velas, nos ayudamos y después de unos días ya la corriente calmó y nos botó para la costa. Logramos llegar de nuevo a Perú, un barco se quedó por horas, pero nadie nos ayudó. Otro compañero pasó y nos pegamos a su línea, pero nos cortó y nos abandonó. Hay una embarcación que dijo ser Ronald I de Pucusana creo y fue quien nos ayudó. Estaba oscuro, no lo vimos bien, pero muchas gracias a ellos”, agregó Sánchez Rivas.
Los sobrevivientes también indicaron a las autoridades una preocupante negligencia. La embarcación en la que zarparon no estaba suficientemente equipada para emergencias; carecía de radio, radiobaliza, chalecos salvavidas y repuestos de batería.
Aún hay otro caso de pescadores desaparecidos sin resolver
En medio de esta buena noticia, hay otras familias de pescadores que aún esperan el regreso de sus seres queridos desaparecidos. El caso tiene que ver con la embarcación André Evans y sus tripulantes, Jesús Quispitupa Rivas y Pedro Ramírez, quienes llevan ocho meses desaparecidos tras perder comunicación el 16 de septiembre de 2023.
La comunidad pesquera de Puerto de Ilo, en Moquegua, sigue consternada y los familiares exigen que no se detenga la búsqueda. Estos han solicitado a la Capitanía de Puerto de Ilo que se intensifiquen los esfuerzos para localizarlos.
Por su lado, el comandante Juan Sánchez, de la Capitanía de Puerto de Ilo, ha señalado que no existe un registro oficial del barco desaparecido, a pesar que la operación de búsqueda se ha mantenido por semanas.
Aún así, las autoridades marítimas han confirmado que siguen rastreando las aguas para encontrar el André Evans, cuya última comunicación fue reportada por el ciudadano Carlos Andrés Navia Joaquín, quien desde la lancha Ivan I, a 130 kilómetros de distancia aproximadamente, logró hablar con uno de los pescadores desaparecidos entre el 10 y 12 de noviembre.