Su nombre es Maykol Víctor Lugo Mota y ahora atraviesa una denuncia por intento de secuestro. La acusación no es para menos, luego que este sujeto fuera visto llevándose a un menor de tan solo siete años, minutos antes de que este infante pueda ingresar a su colegio.
El alarmante suceso ocurrió el último viernes en el distrito de San Juan de Miraflores. Las primeras informaciones a las que tuvo acceso la prensa, señalan que este delincuente, de 20 años y de nacionalidad venezolana, interceptó al menor cuando estaba tan solo a metros de la institución educativa Padre Iluminato, presto para ingresar a sus clases, como todos los días.
Lo más sorprendente de esta desafortunada situación es que el niño se encontraba acompañado de sus primos mayores; sin embargo, los perdio de vista tan solo unos segundos y a unos pasos de ingresar a su centro educativo. Lugo Mota aprovechó ese descuido para llegar hasta el menor y llevárselo consigo.
A este criminal no le importó la presencia de padres y autoridades en las inmediaciones del colegio y, cogiendo del brazo al menor, huyó sin prisa y sin ser advertido. “Mi sobrino estaba llegando al colegio, estaba a unos metros de la puerta de ingreso cuando este sujeto lo intercepta y le dice que lo iba a llevar con su mamá”, comentó la tía del menor a América Noticias.
El individio caminó alrededor de 20 minutos con el menor, hasta que los padres de familia se dieron cuenta que algo no iba bien. Notaron que Maykol Víctor Lugo Mota estaba desaliñado y con la camisa abierta, por lo que alertaron el peligro. Inmediatamente, llamaron al serenazgo del distrito y lograron llegar al estudiante, hasta que pudieron recuperarlo.
En sus primeras declaraciones a las autoridades, Lugo Mota señaló ser el tio del menor, pero este lo desmintió inmediatamente. Posteriormente, el serenazgo, con ayuda de agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP), trasladó al sujeto a la comisaría de San Juan de Miraflores, donde los padres del estudiante lo denunciaron por intento de secuestro.
Secuestro en Perú
Los secuestros en el Perú casi se duplicaron en el último año, pasando de 11 casos en 2022 a 20 en 2023, según informó la División de Secuestros de la Policía Nacional (PNP) al diario El Comercio. Este aumento del 82% se produce tras un período de relativa estabilidad durante la pandemia.
En 2019, se reportaron solo seis casos, lo que evidencia que las cifras del año pasado más que triplicaron esta cantidad. Durante los años 2020 y 2021, las restricciones sociales debido a la pandemia jugaron un papel en mantener estables estos índices, pero la situación ha cambiado rápidamente.
Los secuestros típicos, que abarcan fases de selección, rapto, cautiverio, negociación y pago del rescate, son considerados delitos de alto impacto y contribuyen notablemente a la percepción de inseguridad en el país.
El general en retiro de la PNP Juan Carlos Sotil comentó que, aunque los secuestros han aumentado, no se observan bandas especializadas con la capacidad logística para mantener a una víctima cautiva durante largos periodos. Las víctimas actuales suelen ser emprendedores o sus familiares, al contrario de décadas anteriores cuando los objetivos eran grandes empresarios.
En 2023, el 70% de los secuestros se concentraron en nueve distritos de Lima, y uno de los factores clave para los delincuentes es el fácil acceso a información sobre las víctimas, obtenida a través de mercados negros y redes sociales. La mayoría de las víctimas están en un rango de edad entre 15 y 59 años, siendo más frecuentes los casos en los grupos de 30 a 44 años (41%) y de 15 a 29 años (27%).
Actualmente, hay 849 personas encarceladas por secuestro en Perú, lo que representa el 0.9% de la población carcelaria. De estos prisioneros, el 91% son hombres y el 9% mujeres.