Desde hace más de 20 años, el Aeropuerto Internacional de Chinchero (Cusco) ha sido visto como una pieza clave para mejorar la conectividad aérea y fomentar el desarrollo económico y turístico en la región. Sin embargo, los retrasos en su construcción y desacuerdos entre el gobierno peruano y el consorcio Natividad Chinchero, empresa encargada de la obra, han retrasado su avance.
Advierten riesgo de resolución del contrato
La Contraloría General de la República ha advertido el último jueves que el avance físico de la megaobra tiene un retraso de 47.45% y esta dilación incumple el cronograma vigente aprobado el 29 de abril de 2022 que podría impedir que la infraestructura esté lista para el 27 de julio de 2025. La situación podría generar también un “riesgo de resolución del contrato”.
De acuerdo al ente fiscalizador, la obra debería tener un avance del 57.8 %, pero según la Oficina de Gestión de Proyectos (PMO), solo ha alcanzado el 10.33 %, por lo que se proyecta que el término de la construcción finalice el 1 de septiembre de 2026, y con apuros el 29 de abril de ese año.
Para Luis Aragón, congresista por Cusco de la bancada de Acción Popular, hay posibilidad de que el Consorcio Natividad Chinchero solicite la resolución del contrato, lo cual podría significar una demora adicional de hasta cinco años más en la ejecución del proyecto, posiblemente extendiéndose hasta el año 2030.
La declaración del parlamentario sugiere que si se decide resolver el contrato actual del Aeropuerto de Chinchero, se desencadenarán una serie de complicaciones legales y administrativas. Esto incluiría recurrir a arbitrajes internacionales para resolver disputas con la empresa ejecutora actual. Además, sería necesario convocar un nuevo proceso de licitación pública para encontrar un nuevo contratista que se encargue de continuar con la obra.
¿Por qué hay demoras?
El origen de la controversia entre el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) y el consorcio Natividad Chinchero radica en que este último solicitó al Ejecutivo un monto adicional de US$ 193,000,000 para cubrir los sobrecostos de la obra. Sin embargo, dichos costos no están contemplados en el contrato original.
La nueva propuesta representa un retraso de 120 días de la fecha original de culminación. “El retraso en el avance físico corresponde al componente Obras Principales, el cual está formado por 8 paquetes, entre los que figuran el Terminal de Pasajeros, Complejo Torre de Control, Áreas de Aparcamiento y vías de acceso, plataformas de estacionamiento, área de maniobras, sistema eléctrico, entre otros, cuyo presupuesto actualizado es de US$ 435 309 702″, informó Contraloría.
El informe indica que a mediados del mes pasado, el MTC concedió al contratista un anticipo del 2.5% por un monto de S/ 40,011,776. El documento ha sido notificado al ministerio presidido por Raúl Pérez Reyes para que tome “acciones correctivas inmediatas”.
Como el valor total del proyecto es de US$ 659 millones, la Contraloría ha estado realizando un seguimiento constante mediante control concurrente desde 2019. En octubre de 2019, el Estado firmó un contrato con Corea para recibir asistencia técnica, gestión de contratos de ejecución y supervisión de las obras principales en la construcción del nuevo Aeropuerto de Chinchero.
A pesar de que el consorcio recibió los S/ 40 millones, se anticipa que el caso podría finalizar en un arbitraje. Según RPP Noticias, Pérez Reyes y sus funcionarios “son conscientes del riesgo que implica negociar y llegar a un punto medio con Natividad, por lo que esperan” la resolución de disputas.
El MTC sostiene que la solución debe encontrarse dentro del marco legal y contractual. Por ello, ha invitado al Consorcio Natividad a reunirse “para buscar alternativas de solución”. Además, ha negado que la obra se haya paralizado mientras se intenta alcanzar un acuerdo con la constructora.