La gastronomía peruana, celebrada por su rica diversidad y sabores únicos, continúa su expansión más allá de las fronteras del continente sudamericano y llega a lugares insospechados en un primer momento.
Esta vez, el protagonista de esta travesía culinaria es Mauricio Carbajal, conocido en YouTube como Pasaje en Mano, quien sorprendió a una familia en Sudán del Sur con la preparación de un tradicional plato peruano: arroz con pollo. Y lo que sucedió se ha convertido en viral en todas las redes sociales.
Se adapta a las circunstancias
Durante su estadía en el país africano, Carbajal decidió compartir uno de los emblemas culinarios del Perú. A pesar de las limitaciones y adaptaciones necesarias, el youtuber logró conseguir la mayoría de los ingredientes en un mercado local. Sin embargo, el ají amarillo, esencial para la autenticidad del platillo, lo había llevado desde su tierra natal.
Mauricio, en su video, detalló las dificultades que enfrentaba: “Sin licuadora, estamos haciendo el jugo de culantro con un mortero con hoyo para filtrar. Aunque estamos bien, sufrimos un poco (...) Ahora vamos a agregar el ají amarillo que trajimos desde Perú”, explicó, mostrando la adaptación necesaria para preparar el platillo.
A pesar de no tener experiencia cocinando para un gran número de personas ni utilizando carbón, Carbajal mostró confianza en que su esfuerzo daría buenos frutos.
Con entusiasmo y un toque de nerviosismo, Mauricio expresó: “El reto está muy complicado, pero miren el éxito con este arroz con pollo. Nunca he cocinado en carbón ni para tantas personas, solo me encomiendo a Dios para que salga bien. Realmente, tenemos que dejar bien a Perú”, revelando la presión y la esperanza que sentía durante la preparación.
Listo el pollo
Después de casi tres horas de preparación, Mauricio sirvió el plato a la familia sudanesa. La respuesta fue inmediata y positiva: “La comida está deliciosa”, comentó uno de los locales, validando el esfuerzo y la dedicación del viajero peruano.
Para Carbajal, el éxito de esta aventura culinaria fue un motivo de gran satisfacción. Aunque confesó que no todo salió como esperaba, especialmente en la cocción del arroz, la aceptación del plato fue un triunfo.
“Les ha gustado, al parecer, el pollo está buenísimo, el arroz no me ha salido tan bien porque no se hizo el agua. Estoy molesto con ese tema, pero bueno (...) Siempre es bueno recalcar que yo no soy chef, ni cocinero, yo lo hago esto por afición”, aclaró, destacando su pasión por compartir la cultura peruana.
Reparte alegría por el mundo
Mauricio también relató su experiencia viajando desde los 18 años y cómo, en cada destino, buscaba compartir la comida de su país.
“Yo viajé desde los 18 años y siempre invitaba comida peruana a los extranjeros y a los países a donde iba, lo hice en Inglaterra, lo hice en Cuba, lo hice en República Dominicana, lo he hecho en casi 10 países y por qué no hacerlo ahora en Sudán del Sur”, añadió, mostrando su compromiso con la difusión de la gastronomía peruana.
La travesía culinaria de Carbajal no solo llevó un pedazo del Perú a un rincón lejano del mundo, sino que también demostró la capacidad de la comida para conectar culturas y crear experiencias memorables.
Su esfuerzo es un testimonio del poder de la cocina para trascender barreras geográficas y unir a las personas en torno a un plato compartido.
Este acto de compartir y disfrutar la cocina peruana en Sudán del Sur es un ejemplo de cómo la gastronomía puede ser una herramienta poderosa para el entendimiento y la apreciación mutua entre diferentes culturas.
Mauricio Carbajal, con su entusiasmo y dedicación, continúa llevando los sabores de su tierra a los lugares más remotos, dejando una huella de sabor y calidez peruana en cada rincón del mundo.