Perú y Corea del Sur se comprometen a tener bajas emisiones de carbono en la agricultura y el transporte

Los Gobiernos de Perú y Corea del Sur se comprometieron a tener bajas emisiones de carbono en los sectores de agricultura, transporte, energía e industria, por medio de un Acuerdo de Cooperación sobre Cambio Climático.

El convenio fue firmado en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores del país asiático, en Seúl, y contó con la presencia de los cancilleres de ambas naciones: Javier González-Olaechea y Cho Tae-yul.

De esta manera, los dos países reducirán las emisiones de gases de efecto invernadero e intercambiarán políticas y tecnologías climáticas.

El acuerdo genera, además, un marco importante para cumplir con los objetivos del artículo 6.2 del Acuerdo de París. Como se sabe, todos los países suscriptores a este tratado deben establecer Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC en inglés) y actualizarlas cada cinco años.

Durante su exposición en el Foro de Cooperación Corea - América Latina y Caribe 2024, que se llevó a cabo en Seúl, González-Olaechea destacó el potencial del Perú para hacer negocios debido al crecimiento económico, el manejo adecuado de las cuentas fiscales y la estabilidad de la moneda.

El canciller también mencionó la importancia de aprender de las buenas prácticas que aplicó Corea para una correcta redistribución del ingreso. “Las grandes brechas sociales que existen en América Latina deben ser cerradas con urgencia”, manifestó.

“Las sociedades deben encontrar soluciones como en su origen: cooperando y no enfrentando, priorizando en presupuestos inteligentes lo que se tiene que hacer en función de las grandes mayorías y no privilegiando lo que favorece a pocos”, añadió.

Perú se encuentra entre los países con la peor calidad de aire en Latinoamérica, según el Reporte de Calidad del Aire 2023 elaborado por IQAir. El informe, del 11 de junio de 2024, sitúa al país como el terceromás afectado por este tipo de contaminación en la región, con una medida de PM2.5 de 18.8 µg/m³ (microgramos por metro cúbico de aire), solo superado por El Salvador con 19.5 y México, con 20.1.

Las partículas de PM2.5 en el aire son extremadamente finas, con un diámetro menor a 2.5 micrómetros, y están compuestas de polvo, hollín, suciedad, humo y gotas líquidas. Estos elementos pueden causar graves problemas de salud, incluyendo cáncer, infartos, enfermedades respiratorias y derrames cerebrales, de acuerdo con Elmer Huerta.

IQAir también advierte que la exposición a altos niveles de estos componentes puede afectar el desarrollo cognitivo de los menores de edad, además de causar problemas de salud mental y complicaciones en enfermedades preexistentes como la diabetes.

Según el doctor Alfredo Carlín, asesor médico de Laboratorios Elifarma, la contaminación atmosférica afecta el desarrollo de los pulmones y está estrechamente relacionada con la aparición de enfermedades pulmonares.

“Los niños sufren más los efectos de la mala calidad del aire porque respiran más rápido que los adultos, y absorben más contaminantes. Además, al estar más cerca al suelo, lugar donde algunas toxinas alcanzan concentraciones máximas, están más expuestos porque su cuerpo, su cerebro y pulmones están en desarrollo”, explica.

En ese sentido, señaló que los niños que habitan en distritos con índices elevados, como San Juan de Lurigancho o Comas, y realizan actividades constantes al aire libre, tienen más probabilidades de desarrollar asma. Otra parte de la población afectada son las mujeres embarazadas, ya que la exposición puede originar que sus bebés sufran este mal.

“La prevención comienza desde los primeros meses de vida. Por ejemplo, en el caso de niños prematuros, existen soluciones médicas especializadas que complementan la lactancia y fortalece su sistema inmunológico y favorecen el desarrollo adecuado de los pulmones”, enfatizó el especialista.