La medicina natural ha alcanzado un importante auge en los últimos tiempos, sin embargo no debemos olvidar que el uso de plantas como método alternativo para tratar algunas dolencias ya era practicado por pueblos ancestrales y en muchos casos con muy buenos resultados.
Así hoy en día tenemos a disposición una gran cantidad de plantas y hierbas de uso medicinal, como es el caso del paico, conocido en otros países como apazote y que ha trascendido a través del tiempo gracias a sus propiedades.
¿Qué es el paico?
De nombre científico Dysphania ambrosioides, el paico es una especie de planta originaria del continente americano que se usa en áreas como la medicina alternativa, pero también en la gastronomía, ya que está documentado su uso como un buen condimento para muchos platillos tradicionales de la cocina.
Suele crecer en zonas tropicales, con alta radiación solar y de moderada a alta humedad relativa, a altitudes de hasta 3000 metros sobre el nivel del mar. Se cultiva en suelos areno-arcillosos, pero también crece en laderas peñascosas, suelos no inundables, en chacras y campos abiertos. Comparte hábitat con plantas como el cacao, cedro, uña de gato, zapote y demás. En tal sentido, el paico se puede encontrar en la costa, sierra y selva del Perú, especialmente en departamentos como Cajamarca, Cusco, Huánuco, Loreto y San Martín.
Puede llegar a crecer hasta aproximadamente un metro de altura y cuenta con numerosas hojas de color verde con bordes dentados y pequeñas flores y frutos.
Propiedades
Según información oficial del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) la destilación del paico da como resultado un aceite esencial que contiene ascaridol, componente activo responsable del efecto antiparasitario de esta planta tradicional.
Por otro lado, también tiene propiedades que lo hacen efectivo contra los dolores menstruales y sus hojas suelen ser usadas para tratar males gastrointestinales como los cólicos, indigestión o la diarrea.
Otra de sus propiedades es tratar las heridas. Para ello solo se deben hacer lavados en la zona afectada con el agua de cocción de las hojas y aplicar estas como un emplasto sobre el área que se requiera. Además, los baños de asiento usando el paico pueden ayudar a aliviar las molestias causadas por hemorroides.
Pese a esto, es importante mencionar que esta hierba no debe usarse para reemplazar tratamientos médicos convencionales ya que no se ha demostrado que pueda curar algún malestar o enfermedad. Además, siempre es necesario consultar con los especialistas de la salud en caso de incluirla para combatir cualquier tipo de dolencia.
Asimismo, se debe evitar su uso durante el periodo de embarazo o lactancia, o en tratamientos que van a prolongarse en el tiempo. Cabe recordar que el aceite esencial de paico en fuertes dosis es sumamente tóxico.
Un poco de historia
Esta planta americana es muy conocida en México ya que se sabe era usada por los antiguos aztecas, pero con el nombre náhuatl epazotl, por ello también se le llama epazote. Allí su uso también pasaba por la eliminación de parásitos intestinales.
Se cree que el paico fue introducido en el viejo continente hacia el año 1577 por parte de Francisco Hernández de Toledo, que fue médico del rey Felipe II. Precisamente es gracias a él de quien proviene la primera mención que se conoce en Europa sobre el paico o epazotl. También se enumera y reconoce las propiedades medicinales que los nativos mexicanos le atribuían a la planta.
Sobre su llegada a la Amazonía, se cree que ocurrió en tiempos remotos y es difícil de identificar, sin embargo, logró adaptarse con gran facilidad, lo que ha ayudado a su difusión y popularidad.