En el apresurado ritmo de la vida moderna, las decisiones sobre tener hijos se han visto pospuestas. Las mujeres, impulsadas por sus objetivos profesionales y la búsqueda de realización personal, a menudo retrasan el momento de formar una familia hasta después de los 35 años. Sin embargo, este aplazamiento puede traer consigo varios desafíos para la concepción.
“La mujer de hoy quiere terminar su carrera, ejercer su profesión, alcanzar cierto grado de realización personal y solo después piensa en casarse y tener una familia”, asegura Javier Ascenzo Aparicio, ginecólogo y experto en fertilidad asistida de la Clínica Miraflores. “El problema radica en que la edad es un factor determinante para la fertilidad femenina pues después de los 35 años, la capacidad de sus ovarios para producir óvulos comienza a decrecer”, añade el también Past President de la Sociedad Peruana de Fertilidad.
Se estima que en nuestro país, dos de cada diez parejas enfrentan dificultades para concebir de manera natural. En esta estadística, la edad de la mujer cumple un papel crucial.
Conscientes de esta realidad, muchas parejas han recurrido a los avances en técnicas de reproducción asistida para convertir su sueño de ser padres en una hermosa realidad. Estos tratamientos ofrecen nuevas esperanzas y oportunidades a aquellas parejas que enfrentan dificultades para concebir de manera natural. Sin embargo, es crucial buscar la orientación de expertos para determinar el enfoque más adecuado para cada situación.
En el país, se están llevando a cabo innovadores tratamientos que ofrecen nuevas esperanzas a aquellas parejas que enfrentan obstáculos en el camino hacia la paternidad. A propósito del Día Mundial de la Fertilidad, que se celebra el 04 de junio, aquí describimos los principales:
1. Inseminación Intrauterina. Para algunas parejas, el primer paso en su viaje hacia la maternidad es la inseminación intrauterina. Esta técnica de baja complejidad implica la inserción del esperma directamente en el útero de la mujer, aumentando las posibilidades de concepción. Con la estimulación de la ovulación, se mejora aún más la probabilidad de éxito. Es un procedimiento relativamente sencillo y poco invasivo, que puede realizarse en pocas sesiones. Sin embargo, si después de varios intentos no se logra el embarazo, puede ser necesario considerar opciones más avanzadas.
2. Fecundación in Vitro (FIV). La Fecundación in Vitro es uno de los tratamientos más conocidos y utilizados en el país. Aquí, el proceso de unión del óvulo y el esperma se lleva a cabo en un laboratorio altamente especializado, bajo condiciones controladas. Una vez formado el embrión, se implanta en el útero de la mujer, con la esperanza de lograr un embarazo exitoso. Los laboratorios de FIV deben contar con equipos de última generación, como incubadoras que imiten las condiciones naturales, microscopios especializados y sistemas de almacenamiento para mantener los embriones en óptimas condiciones.
3. Vitrificación de Óvulos. La vitrificación de óvulos es una técnica revolucionaria que ofrece a las mujeres la oportunidad de preservar su fertilidad. Con este procedimiento, los óvulos se pueden almacenar a temperaturas extremadamente bajas, conservando su viabilidad durante años. Esto brinda a las mujeres la libertad de planificar su maternidad según sus deseos y circunstancias individuales, sin verse limitadas por el reloj biológico. Además, esta técnica ha saltado al siguiente nivel con ayuda de la Inteligencia Artificial, a través de softwares que predicen con mayor precisión la probabilidad de fecundación de los óvulos. Así, al ofrecer información exclusiva sobre la viabilidad de los ovocitos en lugar de los embriones, esta tecnología permite a los especialistas y pacientes tomar decisiones de tratamiento más informadas.
4. TOMI. El innovador TOMI (Transferencia de Ovocitos Microinyectados) ha abierto nuevas puertas para aquellas parejas que enfrentan desafíos específicos de fertilidad. Desarrollado en el Perú por los hermanos Ascenzo Aparicio de la Clínica Miraflores, este procedimiento permite la transferencia de óvulos microinyectados directamente a las Trompas de Falopio, facilitando el proceso de fecundación en casos donde la implantación tradicional no es posible. Gracias al TOMI, muchas parejas han logrado superar obstáculos previamente insuperables, dando paso a la creación de nuevas vidas.
15% de la población afectada
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la infertilidad afecta al 15% de la población en edad fértil en Perú, lo que representa a cerca de 1′500.000 personas. Esta realidad pone de manifiesto la urgente necesidad de mejorar el acceso a tratamientos de fertilidad accesibles y de calidad.
La infertilidad en Perú afecta a una gran parte de la población en edad reproductiva, con un 40% de los casos atribuidos a problemas masculinos, otro 40% a problemas femeninos, y un 20% a razones desconocidas. Este desafío afecta profundamente a las parejas, marcando un camino lleno de obstáculos hacia la maternidad y la paternidad deseada.
“Este panorama resalta la importancia de abordar tanto la salud reproductiva masculina como femenina en la planificación familiar. Es crucial destacar que este tema se está desmitificando y cada vez se discute más en conversaciones cotidianas, lo que facilita una mayor apertura y búsqueda de soluciones para la infertilidad”, indicó la dra. Jeannette Marchena, ginecóloga y especialista en Medicina Reproductiva de Clínica Delgado Auna.